Los 316 juegos de un Barcelona histórico

Por más de cinco años, los azulgranas tuvieron la posesión absoluta del balón

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Hace cinco años, el FC Barcelona dio a luz un estilo de juego que traía en su ADN un gen posesivo, una manía egoísta de convertirse en dueño de la pelota, tocarla incansablemente y esperar con paciencia franciscana –aunque fueran perdiendo– a que se abrieran los caminos para clavar la estocada mortal.

Nació así un estilo de juego casi perfecto que elevó al equipo de Pep Guardiola y Tito Vilanova a un escalón en el que solo pueden estar los más grandes de la historia.

En una de esas paradojas del fútbol, hace una semana, el Barça goleó 0-4 al Rayo Vallecano, pero perdió la posesión del balón (51-49%) por primera vez en un partido oficial desde aquel lejano 7 de mayo del 2008, en el Santiago Bernabeu, cuando el Real Madrid cosechó un ajustadísimo 50,3%.

Fueron 316 partidos oficiales, 28.440 minutos de juego disputados en seis competiciones diferentes, en los que el equipo blaugrana se dedicaba a tocar la pelota y solo se la prestaba por ratos al rival.

Ese exquisito estilo de juego, bautizado “tiqui-taca” por el sonido que hace el balón cuando va de botín a botín, fue el medio perfecto para que el club catalán cosechara 15 títulos durante todo el tiempo que el esférico les perteneció.

Pocas veces estuvieron a punto de perder la pelota. Una fue en febrero del 2010, ante el Getafe, en un juego en el que Barcelona terminó con nueve hombres, una victoria 2-1 y un 51,9% de posesión.

La otra fue en el Santiago Bernabeu, por la Copa del Rey del 2011, ante un Real Madrid que se fue al descanso con un 54% de posesión, pero durante la segunda parte vio cómo su dominio se caía hasta un 48%.

Después de ahí, fueron pocos los que plantaron cara al monstruo creado por Guardiola y muchísimos los que no alcanzaron siquiera a ver la sombra de la pelota.

Con un promedio de 68% de posesión, hubo juegos en los que el relojito blaugrana superó el 80%. Como el 7 de noviembre del 2012, cuando registraron un estratosférico 89% de control de pelota y solo dejaron que el equipo escocés la tuviera durante 47 segundos en la segunda mitad de su juego en la fase de grupos de la Liga de Campeones.

Irónicamente, el Barcelona perdió esa noche 2-1, pero hubo otras jornadas en las que se dio festines de seis, ocho y hasta nueve goles.

¿Nueva era? Luego de cinco temporadas, el cansancio de Pep Guardiola y la enfermedad de Tito Vilanova abrieron hace unos meses la puerta para que el argentino Gerardo Martino tomara el timón del casi insumergible barco azulgrana.

Desde su llegada al banquillo catalán, el Tata ha introducido varios cambios al estilo de juego del Barcelona, con el objetivo de llegar con menos pases y mayor efectividad al área rival.

Para algunos, ceder la posesión y el pressing que llenaron de orgullo a la afición culé, marca el final de la filosofía que impuso Guardiola (y prolongó su asistente Tito Vilanova) y el comienzo de una nueva era para el Barça .

Sin embargo, pareciera que el “nuevo Barcelona” tampoco está enemistado con la pelota. Solo tres días después de haberla perdido ante el Rayo, volvió a encontrarla ante la Real Sociedad, en el Camp Nou, con un apabullante 68% de posesión y una nueva goleada de 4-1.

Durante el juego, Messi, Xavi, Iniesta, Neymar y compañía mostraron las virtudes que ostentó el Barça en los últimos años, hasta terminar con 762 pases en el partido y un 93% de efectividad en los servicios, la mayor cifra alcanzada por un equipo en este torneo... ¿será el segundo aire del tiqui-taca?