Puerto La Cruz Por muchos años Venezuela fue el comodín del balompié suramericano.
Un encuentro con la Vinotinto eran casi tres puntos seguros. Sin embargo, desde hace exactamente una década los venezolanos comenzaron a propulsar su futbol a niveles que no conocían y ahora son un competidor más.
Todavía están lejos de potencias como Brasil, Argentina o Uruguay, pero dejaron atrás a selecciones como Bolivia y Perú.
Hasta hace tres eliminatorias, nunca habían ganado un encuentro como visitante y siempre fueron últimos en su región.
No obstante, para la cita de Japón y Corea del Sur 2002 rompieron ambos récords negativos bajo la conducción de Richard Páez, a quien en este país se le ve como el iniciador del camino. Ganaron en Chile 0-2 y terminaron novenos (de diez) con 16 puntos.
Posteriormente, los venezolanos mejoraron aún más y para Alemania 2006 cerraron octavos con 18 puntos. Y para Sudáfrica 2010 estuvieron en la pelea por un boleto al Mundial hasta la última fecha , al quedar octavos con 22 unidades, en una de las eliminatorias más reñidas de la historia.
Este impulso le sirvió al jugador venezolano –que antes no era muy cotizado en otros países– para revalorizarse y poco a poco tener opciones fuera de sus fronteras. Incluso en Europa.
Para el encuentro ante los ticos el técnico César Farías convocó a 12 legionarios (entre ellos el capitán Juan Arango del Borussia Moenchgladbach, Alemania, y Nicolás Miku Fedor de Getafe, España), dentro de un equipo que llega con lo mejor de su arsenal.
Otro referente es José Salomón Rondón (Málaga, España), uno de los artilleros estelares.
Participaciones. La Vinotinto solo tiene un par de citas planetarias en su currículum.
Una es la Olimpiada de Moscú 80, a la cual fue invitada por el boicot de más de 60 países contra los soviéticos. Ya con todas las de la ley se clasificó a la Copa del Mundo Sub-20 de Egipto 2009, en la cual sorpresivamente se coló hasta los octavos de final (perdieron ante Emiratos Árabes Unidos).
Otro buen resultado es la histórica clasificación a la ronda de los cuartos de final en la Copa América del 2007, la cual organizó.