La Conmebol dará un paso gigantesco en su afán de ingresar al mercado más grande del mundo: los Estados Unidos. ¿Cómo? Aprovechando el centenario de la organización para inventarse una nueva Copa América que será en el 2016.
Se disputará en el país norteamericano y, por razones obvias, se llamará Copa América Centenario. Servirá para celebrar el siglo de vida de la institución que reúne a las diez federaciones de futbol del cono sur del continente.
Así lo definieron los presidentes de las federaciones suramericanas ayer, en su reunión con el Cómite Ejecutivo de la Conmebol.
La buena noticia para los países de Norte, Centroamérica y el Caribe es que se le dará una cuota de seis participantes a la Concacaf.
Además de las 10 selecciones de la Conmebol, jugarán fijos Estados Unidos y México.
Los otros cuatro participantes clasificarán de acuerdo al rendimiento en la Copa de Oro, aunque el comunicado no aclaró si se trata de la edición del 2013 la que se usará como parámetro.
Además, se confirmó que México y Japón serán los invitados a la Copa América que sí es oficial, la de Chile en el 2015.
Interés por el norte. Desde hace años la Conmebol ha mostrado marcado interés en hacer negocios con el norte del continente.
Desde 1993 se decidió dar dos invitaciones por edición a selecciones fuera de América del Sur. Desde entonces México ha estado presente en todas las ediciones, llegando incluso a jugar la final.
La selección de Costa Rica ha asistido en cuatro ocasiones a la competición y estuvo presente en la última edición, jugada el año pasado en Argentina.
En 1998 los clubes mexicanos iniciaron su participación en la Copa Libertadores, siendo los más exitosos el Cruz Azul en el 2001 y el Guadalajara en el 2010, con sendos subcampeonatos.
Sin embargo, la Concacaf se ha mostrado celosa del interés de sus selecciones por medirse a representativos tan fuertes como Argentina o Brasil. Incluso llegó a obligar a México y a Costa Rica a asistir con equipos Sub-23 a la edición 2011.
También obliga a que los campeones de México participen en su Liga de Campeones y no la Libertadores o la Copa Sudamericana.