El futbolista costarricense Francisco Calvo compartió desde Turquía un lazo negro en solidaridad con el devastador terremoto que ha provocado la muerte de miles de personas, para revelar esa mezcla de agradecimiento por la vida y de consternación por el sufrimiento a su alrededor.
“Gracias a todos los que se preocuparon por mí y preguntaron, gracias a Dios estoy bien”, agregó. En su historia, Calvo también colocó dos emoticones tristes.
Francisco Calvo, defensa de la Selección Nacional, aseguró estar muy triste y consternado por la situación que se vive en Turquía.
Calvo manifestó estar bien y según expresó no sintió el sismo porque estaba lejos de la ciudad donde se presentó la tragedia.
“Gracias a Dios estoy bien, pero triste y consternado por lo que pasó. Levantarse con esa noticia es duro, saber que estoy en este país es aún más, pero estoy en Estambul porque jugábamos ante el Fenerbahçe y loǵicamente suspendieron todo. El terremoto fue al sur del país en Gaziantep y aquí (Estambul) no se sintió”, dijo Francisco Calvo, en declaraciones que brindó a Melissa Alvarado, periodista de Canal 7.
Francisco añadió que el ambiente que se percibe en Turquía es de incertidumbre.
“En Estambul no pasó nada, gracias a Dios y en Konya que es la ciudad donde vivo, pregunté y tampoco se sintió, lo que se sintió fue la réplica.
El país es un caos total, ha pedido ayuda internacional, pusieron alerta 4 como le llaman acá y es muy duro ver a familias y niños con esta situación. Solo Dios lo puede librar a uno de estas cosas y mis condolencias, hay que poner en oración a las personas que han perdido familiares”.
De acuerdo con los registros sismológicos, el epicentro de la falla fue en Turquía. Justo en ese país es donde actualmente reside el futbolista, quien juega con el club Konyaspor. Calvo aseguró que está fuera de peligro. “Mis oraciones están con todas las familias que están pasando momentos tan difíciles debido al terremoto ocurrido. Fuerza”, escribió el futbolista.
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Según el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoga, cerca de 5.400 personas resultaron heridas por el sismo y aproximadamente 2.818 edificios se derrumbaron en ciudades como Adana, Gaziantep, Sanliurfa y Diayarbakir. En Siria, de acuerdo con informaciones de AFP, el temblor causó al menos 783 muertos y 2.280 heridos.
Las cifras de los países afectados posiblemente aumenten, pues los equipos de emergencia aún continúan con las labores de rescate. El terremoto de este lunes es el más importante en territorios turcos desde el ocurrido el 17 de agosto de 1999, que causó 17.000 muertos.
Los aeropuertos de Hatay, Maras y Gaziantep fueron cerrados, el gas suspendido, y Kurdistán iraquí informó que pausaría las exportaciones de petróleo a través de Turquía.
Con datos de AFP.