El brasileño Marcelo incurrió en una escalofriante falta sobre el argentino Luciano Sánchez, en el partido por la Copa Libertadores realizado este martes entre el Fluminense y Argentinos Juniors, que concluyó con marcador de 1-1.
Luego de la dura acción, el exdefensor del Real Madrid fue expulsado y salió llorando y ofreciendo disculpas, mientras los compañeros de Sánchez llamaban en forma desesperada a la Cruz Roja para que atendiera al jugador.
Se jugaban nueve minutos de la segunda parte y Argentinos ganaba 1-0 con anotación de Gabriel Ávalos, cuando Marcelo salió conduciendo por la mitad de cancha. La pelota se le fue larga y, al intentar trabar con Sánchez, impactó cerca de la rodilla izquierda con la plancha, provocando la espeluznante lesión, de la que inmediatamente se dio cuenta el brasileño.
El lateral del Fluminense, de 35 años, se tomó inmediatamente la cabeza con las dos manos dándose cuenta de lo que había ocurrido, mientras los cuerpos médicos de ambos clubes se acercaron rápidamente a auxiliar al jugador del Bicho de La Paternal, según indicó el diario El Clarín en su versión digital.
Una vez que lo retiraron del terreno de juego el árbitro chileno Piero Maza fue convocado por el VAR para revisar la acción. El silbatero se acercó a Marcelo, le puso sus dos manos sobre los hombros para tratar de explicarle y luego le mostró la tarjeta roja.
Los jugadores y cuerpo técnico de Fluminense protestaron esa decisión, al indicar que la acción había sido fortuita y no producto de la mala intención de Marcelo.
En sus redes sociales el club comunicó que Sánchez fue trasladado al hospital Finochietto.
Posteriormente se confirmó que Sánchez sufrió una “luxación completa en la rodilla izquierda”, por lo que será operado en las próximas horas y tendría entre ocho y 12 meses de recuperación.
Luego del partido Marcelo escribió una disculpa en su cuenta en Twitter.
“Hoy me ha tocado vivir un momento muy difícil dentro del campo. Sin querer he lesionado a un compañero de profesión. Quiero desearte la mejor recuperación posible, Luciano Sánchez. ¡Toda la fuerza del mundo!”, comentó.