El astro argentino Lionel Messi inició ayer junto a su papá, Jorge, un duelo con la justicia, por una supuesta defraudación fiscal.
Apenas amanecía ayer luego de aterrizar en Guatemala para disputar un partido amistoso con la selección de Argentina ante el equipo local y Messi se enteró de la noticia por los medios de comunicación.
La fiscalía española presentó una querella contra ambos, a los que acusa de tres delitos por haber defraudado presuntamente más de 4 millones de euros ($5,3 millones) a la hacienda pública.
De inmediato Messi negó haber cometido infracción alguna y confió en que sus asesores aclaren el malentendido.
“Nos hemos enterado por la prensa de las acciones iniciadas por la fiscalía española”, dijo Messi en un comunicado en su sitio oficial en Facebook.
“Nos causa sorpresa porque nunca hemos cometido infracción alguna. Siempre hemos atendido todas nuestras obligaciones tributarias siguiendo los consejos de nuestros asesores fiscales, quienes se encargarán de aclarar esta situación”, agregó.
La denuncia, firmada por la fiscal Raquel Amado, fue registrada en un tribunal de Gavá, el municipio a las afueras de Barcelona en el que reside el astro argentino.
Un juez deberá decidir ahora si la acepta o no antes de formular cargos contra el futbolista.
Según la fiscalía de delitos económicos, Messi y su padre, Jorge Horacio, ocultaron ingresos por derechos de imagen superiores a los $5 millones en sus declaraciones de impuestos de 2007, 2008 y 2009.
En la querella, de 13 páginas, la fiscal Amado acusa a Jorge Messi de crear una trama societaria cuando su hijo era menor de edad para “eludir la obligada tributación” por la explotación de sus derechos de imagen.
Dicha trama consistió en “simular la cesión de sus derechos de imagen a sociedades puramente instrumentales” .
Según la fiscal, cuando Messi alcanzó la mayoría de edad y obtuvo la nacionalidad española en 2005 “ratificó con su proceder la iniciativa defraudatoria de su padre, a sabiendas de que no pagaba impuesto alguno por los cuantiosos ingresos derivados de la cesión y explotación de derechos de imagen”.
El Barcelona, club al que llegó Messi con solo 11 años, declinó hacer comentarios sobre la querella.
Euforia albiceleste. Messi y sus compañeros de selección se dedicaron a descansar ayer durante todo el día tras disputar el martes un juego eliminatorio ante Ecuador.
Es sí, la participación de Messi en el juego que se llevará a cabo mañana a las 8 p. m. en el estadio Mateo Flores es una incógnita.
Según una publicación del diario Sport de Barcelona, la Federación de Fútbol de Guatemala pagará $1 millón a su homóloga de Argentina por el juego, y medio millón más si Messi salta al terreno de juego como titular.