Cartaginés partió con ilusión hacia Argentina

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El partido contra Vélez Sarsfield en Buenos Aires ya inició para los futbolistas del Cartaginés. No hay presión en sus rostros. La fe y optimismo por trascender en la historia y traerse para Costa Rica la Copa Interamericana se reflejaron en sus rostros al partir anoche hacia tierras suramericanas.

Horas antes, la ciudad de Cartago los despidió con cariño. Los pobladores se reunieron a las 6 p.m. en el estadio Fello Meza, para salir en caravana hacia el aeropuerto Juan Santamaría. Entre vítores y bocinas, el plantel brumoso sintió el calor de sus seguidores.

"El ambiente fue grandioso. Nos sentimos como si ya hubiese comenzado el partido. Sólo estamos a la espera de que ruede el balón", manifestó con ansiedad el capitán Alexánder Madrigal, quien fue autorizado a viajar tras superar su enfermedad de varicela.

En los pasillos de la terminal aérea no hubo nerviosismo, sino una sensación de camaradería entre jugadores, directivos, cuerpo técnico y familiares que llegaron a brindarles el respaldo por la aventura que se avecina.

Del plantel oficial, no hubo quién se quedara en casa, salvo el lesionado Juan Luis Parra. Aparte de los titulares y suplentes, viajó el resto del plantel, que prefirió renunciar al premio por jugar esta copa, a cambio de ir todos a Buenos Aires.

"Acción y decisión"

El responsable técnico blanquiazul, Rolando Villalobos, resumió en dos palabras la misión de su equipo ante Vélez: "Acción y decisión. La acción que haremos en el campo de juego y la decisión para traspasar las fronteras nunca antes alcanzadas por un club nacional".

Villalobos, apostado en el mostrador de chequeo de boletos y equipaje, declaró que llevará el juego al plano físico. "Ellos (Vélez) hicieron una minipretemporada y apenas están entrando en ritmo, nosotros hace rato que lo tenemos y a ese plano jugaremos para tener ventaja, además del aspecto táctico".

"Trabajamos no solo para traernos la Copa, sino para que nuestra actuación sirva de motivación para la Sub-23 y la Mayor, en sus ideales por ir a Atlanta y Francia", expresó.

Cerca de Villalobos, el defensor Erick Rodríguez declaró que encontrarán un ambiente hostil y un arbitraje casero, pero "me concentraré en la función que me mande Rolando para luchar, por mis hijos, mi esposa Grace, Cartago y Costa Rica".

El goleador Norman Pin Gómez, los volantes Alexánder Gómez y Marco Tulio Hidalgo externaron que la Copa no es imposible para Costa Rica, hay confianza en el grupo, aparte que la ocasión es una buena vitrina para cotizarse en el futbol internacional.

Hidalgo, que anotó el gol del triunfo en la final regional ante el Atlante de México, sueña con un tanto de penal al paraguayo José Chilavert, en los 90 minutos o en la serie de penales, si es necesario llegar a esa instancia.

"Si llega la oportunidad de cobrar la pena máxima, espero tener confianza y tranquilidad para definir", dijo Marco Tulio.

La delegación tica partió anoche hacia Argentina en vuelo de la compañía chilena Ladeco, con escalas en Ecuador y Chile, donde permanecerá unas siete a diez horas en Santiago. Allí entrenará en el campo de la Universidad Católica.

La llegada a Buenos Aires está prevista a las 7 p.m., hora argentina (4 p.m. hora nacional). Cartaginés se alojará en el hotel El Presidente, situado a 45 minutos del estadio José Amalfitani, sede del choque en el barrio de Liniers.

Celebrará su primer entrenamiento mañana viernes en el complejo deportivo de Vélez, que reúne a 36 disciplinas, y en la noche hará un reconocimiento a la cancha del estadio de Liniers, informó desde Buenos Aires el gerente brumoso Américo Bravo.

"Sus instalaciones tienen el tamaño de La Sabana, las canchas son preciosas y ni qué decir del campo del estadio, que parece una mesa de billar o una enorma pintura verde", ilustró.