Brujas defrauda y deja el pasaporte hipotecado

Los hechiceros dejaron una pobre impresión con su empate de anoche

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Heredia. Brujas empató, ofreció una fea cara y dejó la clasificación a la ronda de grupos de la Liga de Campeones de la Concacaf en veremos.

Los hechiceros permitieron un gol en tiempo de descuento del Joe Public, que significó la igualdad a dos tantos.

Fue un mal partido, que ni el hecho de cuatro anotaciones puede maquillar.

El primer tiempo fue soso, incoloro e insaboro; sin chispa, como un esmeril de hule.

Y eso que en menos de un cuarto de hora ya habíamos sido testigos de dos goles: uno por bando.

Los hechiceros marcaron de primero, un gol de camerino, de esos que bien aprovechados le permiten a un equipo navegar en aguas tranquilas e imponer condiciones al adversario.

Andrés Núñez fue el encargado de sacudir las redes del club trinitense y por ahí pareció decantarse el partido. Solo transcurría un minuto de partido.

Sin embargo, los locales desperdiciaron la renta (en todo caso no era mucha) y los visitantes se sobrepusieron al contraste y ante la desidia empataron el juego.

Kerry Baptiste (12’) concretó la amenaza que, un minuto antes había hecho Yu Hosshide con un remate que reventó en el poste derecho de Luis Diego Sequeira.

Luego de eso hubo poco y nada: nunca dos goles tan tempraneros prometieron tanto y dieron tan poco.

Brujas cayó en una especie de pasmo, agravado con un falta de ideas y adecuado manejo de los tiempos.

Por su parte, el Joe Public, bien pagado con el punto, pues se conformaba con el botín; sin embargo, se mostraron con mejor toque y pasaron la bola con propiedad y hasta insinuaron que podían esperar algo más.

No pasó de algunas aproximaciones en pies de Hoshide y Hayden Tinto, principalmente.

Brujas enseñó deficiencias a la hora de pedir peaje en la mitad de la cancha, sobre todo porque José Luis Cordero no le halló el hilo al partido en sus tareas defensivas, cuando él tiene un perfil ofensivo.

El panorama no cambió mayor cosa en la segunda mitad.

Sin cambio. Cierto que Josimar Arias se vio un poco más a la hora de llevar la pelota y cierto que los trinitenses bajaron su entusiasmo por las incursiones al área rival; pero, en lo soso y en la pasmosa falta de imaginación de Brujas, todo siguió igual.

No había novedad en el frente, hasta que llegó la desafortunada jugada del meta visitante, Glenroy Samuel (65’).

Ese “bomberazo” le salvaba o los tres puntos a los desamparadeños: no era la mejor; pero, al menos, le daba la ventaja para la vuelta, la semana entrante en Trinidad y Tobago. Y cuando los brujos ya hacían caja con el triunfo vino el riflazo de Trent Noel para dejar a los desamparadeños con el ceño fruncido y las dudas ampliadas.