La victoria de anoche en San Salvador mantiene el camino despejado para que el Club Sport Herediano consiga el boleto a la siguiente fase de la Liga de Campeones de Concacaf.
Sin embargo, compromete a los florenses a derrotar también al León de México en el duelo del próximo miércoles 24, en el estadio Eladio Rosabal Cordero, o al menos asegurar un empate y sentarse a esperar durante varias semanas por el ansiado boleto.
Matemáticamente, el 2-4 es un buen resultado para el equipo dirigido por Jafet Soto: ganó tres puntos, sumó cuatro goles de visitante, mantuvo el primer lugar del grupo y dejó fuera de la contienda al equipo salvadoreño.
Con siete puntos, los rojiamarillos solo tendrán que derrotar al campeón azteca en Heredia para asegurarse el liderato del grupo y el boleto directo a cuartos de final, pues las diez unidades serían una cifra inalcanzable para un León que solo tiene un juego pendiente.
No obstante, el camino a la segunda ronda podría nublarse si heredianos y esmeraldas empatan 1-1 en el juego del miércoles.
Larga espera. Ceder un punto en su estadio obligaría a los rojiamarillos a esperar el resultado del choque entre León e Isidro Metapán, en Guanajuato, el 23 de octubre.
Si los aztecas ganan igualarán en el primer lugar del grupo con el Herediano, con ocho puntos.
La igualdad entre ambos clubes se mantendrá también en los tres criterios de desempate que establece el reglamento de la Liga de Campeones de Concacaf.
Así, costarricenses y mexicanos quedarán empatados en puntos, gol diferencia en los partidos entre ambos (0) y goles de visitante en el duelo particular (1).
Lo que definirá al ganador del grupo será la mayor diferencia de goles en todos los partidos disputados en la primera fase.
Ese criterio obliga al equipo mexicano a golear al menos 4-0 al equipo salvadoreño, como lo hizo el Herediano en el primer duelo del 21 de agosto pasado, ya que el Team repitió ayer el mismo marcador con que el León ganó su primer duelo en suelo cuscatleco.
Una victoria menor dejaría al Herediano con el boleto a cuartos, pero un premio por el que deberá esperar al menos un mes.