No toda selección de baloncesto de Estados Unidos es un Dream Team . Lo demuestra el equipo que representará al país norteamericano en el Mundial FIBA.
LeBron James, Kevin Durant, Dwight Howard... Son solo algunas de las estrellas que dijeron no al Mundial. Para ellos las Olimpiadas son la verdadera tierra soñada.
Esta es, si acaso, la tercera batería de los Estados Unidos. Así quedó, entre lesiones, como la traumática experiencia de Paul George, y el desinterés de unos astros que prefirieron enfocarse en la cambiante NBA y, a su vez, acelerar la renovación generacional.
Aún así, este equipo tiene con que salir campeón. Así que enfoquemos la atención en los que sí están.
El ala-pívot Anthony Davis, jugador de tercer año de los Pelicans de Nueva Orleans, es la visible figura del equipo que dirige el experimentado Mike Krzyzewski.
Alrededor de la explosividad de Davis rotará parte de la ofensiva. También en un grupo de perimetrales ágiles que cargarán con los números altos en la pizarra. Nombres como el triplero Stephen Curry (Warriors) y el incisivo James Harden (Rockets).
También cargan con hombres grandes fuertes, como el centro DeMarcus Cousins, de los Kings.
La incógnita es Derrick Rose (Bulls), quien viene de dos terribles años de lesiones y no se sabe si estará al nivel del MVP de 2011.
Tanto así que Kyrie Irving (Cavaliers) podría ser el armador del quinteto estelar del Coach K . Todavía se analiza. Harden y Curry lo acompañarán en el perímetro.
La pintura será para Davis y Kenneth Faried (Nuggets), aunque Cousins estaría listo para entrar en cualquier momento que se requiera más peso al fondo.