Londres. AP. Mario Balotelli demandó al Manchester City, ante el tribunal de la Liga Premier y creó el espectro de otra turbia batalla legal entre los campeones ingleses y uno de sus astros.
La campaña pasada, fue el argentino Carlos Tévez quien estuvo en conflicto público con City, al negarse a ingresar como substituto en un partido de la Liga de Campeones y después irse un exilio autoimpuesto de tres meses en Argentina.
Ahora es el turno de Balotelli de enfrentarse con la nueva potencia del fútbol inglés, en la culminación de una amarga disputa de ocho meses.
El temperamental artillero italiano trata de conseguir la anulación de una fuerte mula disciplinaria que le impuso City la campaña pasada por su conducta en la cancha, que le hizo perderse un total de 11 partidos.
Se piensa que la multa de Balotelli es 340.000 libras ($550.000, el salario de dos semanas) y algunos reportes dicen que el club ya le rechazó una apelación.
La prensa británica e italiana dicen que las relaciones están al borde de romperse, con Supermario fuera de las gracia del técnico Roberto Mancini.