Un editorial esperado

Sobre el juicio contra El Universo, La Nación muestra solo una cara de la moneda

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El diario La Nación del 28 de febrero, con el título “El “perdón” de Correa” , editorializa sobre la decisión del presidente constitucional del Ecuador, Rafael Correa, de perdonar al diario El Universo de la ciudad de Guayaquil, a sus directores y al columnista Emilio Palacio, condenados en las tres instancias judiciales que llevaron el proceso, por injurias contra el economista Correa.

Parafraseando, podríamos decir que es “la historia de un editorial esperado” pues es un hecho la solidaridad que existe entre los miembros del Grupo de Diarios de América y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que representa a los propietarios de los medios escritos de América, para defender a un importante socio, como es El Universo, independientemente de la razón que pueda asistirle o no para ser enjuiciado.

La unión hace la fuerza, es casi un axioma que el poder mediático que tienen el GDA y la SIP se han encargado de demostrar a nivel continental, aunque es un hecho que a nivel de cada país también existe, porque nadie puede negar que La Nación es un poder en Costa Rica, o, en el caso del Ecuador, El Universo en Guayaquil o El Comercio en Quito, ejemplos de medios escritos que representan a grupos económicos de gran influencia, mayor a lo deseable en términos de los intereses democráticos del país.

Una de las formas en que un medio ejerce su poder, es discriminando cuando publica o no una nota enviada como “derecho de respuesta”. Tal el caso de nuestra carta enviada a la estimada directora de La Nación , doña Yanancy Noguera el 23 de febrero, luego que La Nación diera un gran despliegue informativo, en la edición de ese día, a la columna “No a las mentiras” del editorialista del diario El Universo, Emilio Palacio, que dio origen al conflicto con el presidente Rafael Correa.

No es fácil recordar una acción tan concertada del GDA y la SIP en defensa de un periódico. El despliegue a cinco columnas del título “ Grupo de diarios censura condena contra El Universo en Ecuador. NO a las mentiras ”. A más de reproducir la columna que dio origen a la demanda, ofrece una amplia información de los hechos suscitados así como un cronograma.

En nuestra carta a La Nación, expresamos que agradecíamos la publicación de la columna origen del problema, ya que así los lectores imparciales del país, y de otros países, podrán formarse su propio criterio sobre si el lenguaje y los términos usados por Palacio contra el presidente Correa justificaban o no su rechazo y la demanda por injurias. Decíamos que Rafael Correa pidió al periodista que presente pruebas de lo dicho o rectifique. No presentaron pruebas ni tampoco rectificaron.

En toda la amplia información que ofrece La Nación, muestra solo una cara de la moneda. No dicen en ninguna parte que el presidente Correa, antes de presentar la demanda, pidió a Palacio y al director de El Universo que rectificaran su error y se disculparan, no con él, sino con el pueblo ecuatoriano, con lo cual quedaba terminado el incidente.

Explicamos también por qué el 23 de enero, cuando el proceso en tercera instancia llegaba a su término, y el director de El Universo, Carlos Pérez, aceptó firmar una disculpa, Rafael Correa la rechazó. Mencionamos que lo hizo, primero, porque todo en la vida tiene un costo de oportunidad, y Carlos Pérez, mal aconsejado por su orgullo, hizo un acto de contrición tardío.

Desde la perspectiva de la línea editorial del diario, así como de los contextos políticos de cada país, que tienen connotaciones diferentes uno a otro, pueden cometerse injusticias si se presentan en forma parcial muchos hechos, y lo que es más peligroso, se juzgan a las personas con demasiada ligereza.

El presidente Rafael Correa nunca tuvo interés en llevar a la cárcel a ningún periodista, y peor aún, enriquecerse con las multas impuestas.

Ha querido establecer un precedente en cuanto a que todo ciudadano, en el Ecuador y en América Latina, puede acudir a la justicia, cuando alguien es calumniado.

Los hechos, que son más importantes que las palabras y los juicios, lo están demostrando, aunque desde las tiendas de quienes lo adversan, siempre buscarán segundas intenciones.

Javier Llorca Vega Encargado de Negocios a.i., Embajada del Ecuador en Costa Rica