Recientemente he leído numerosas preocupaciones y opiniones sobre cómo Costa Rica podría alcanzar un mayor crecimiento económico, incrementar el intercambio comercial y atraer más inversión extranjera directa para generar mayores oportunidades de empleo.
Tomando en cuenta la preocupación existente, los grandes esfuerzos que realiza el Gobierno de Costa Rica, la gran potencialidad del país y su posición geográfica estratégica, considero que vale la pena impulsar el desarrollo de un aeropuerto intercontinental y nuevos puertos a gran escala en las regiones Atlántica y Pacífica del país, para posicionar al aeropuerto y los puertos como pilares del desarrollo de la economía costarricense.
El potencial que posee Costa Rica se evidencia en casos como los de Hong Kong y Singapur, países que apostaron por un modelo de desarrollo económico que rindió frutos. Si no hubieran ejecutado grandes proyectos de infraestructura, no tendrían el extraordinario nivel de desarrollo actual y un PIB per cápita de más de $38.000 y $55.000 respectivamente, y seguirían siendo países rezagados. El aeropuerto de Incheon y el puerto de Busan en Corea son también dos ejemplos que Costa Rica puede utilizar para investigar y estudiar.
Al estar rodeada al este por el océano Atlántico y al oeste por el Pacífico, tener muy cerca el canal de Panamá y poseer un alto nivel de desarrollo humano, Costa Rica ostenta las características necesarias para convertirse en un hub de comercio exterior, inversión, transporte, almacenaje y logística, que se conecte con Centroamérica, Estados Unidos, América del Sur, Europa y la región Asia-Pacífico.
Con este proyecto, Costa Rica podría convertirse también en una cuna de innovación y alta tecnología; ampliar su competitividad y potencialidad y facilitar el desarrollo y dinamismo de otras industrias como turismo, hotelería, almacenaje, transporte, logística, gastronomía, eventos y conferencias, entre otras.
En este contexto, es primordial tomar en consideración las oportunidades que pueda ofrecer el desarrollo de un puerto en el Pacífico costarricense. Actualmente, un 80% de las exportaciones e importaciones de Costa Rica se hacen a través del puerto de Limón, mientras que el restante 20% pasa por Caldera.
En un futuro no muy lejano, esta tasa de comercio, volumen y tránsito de carga desde diferentes destinos del mundo podrían movilizarse drásticamente del Atlántico hacia el Pacífico.
Si Costa Rica reconoce su potencialidad para convertirse en un hub y la relevancia de la evolución que experimentó el Asia-Pacífico (región cuya influencia y capacidad aumenta constantemente de manera acelerada en sectores como comercio, inversión, ciencia, tecnología e industria), y desea considerar estos factores como elementos para dinamizar su economía, aumentar la inversión y posicionarse a nivel internacional, lograría apreciar mejor la importancia de desarrollar de forma inmediata los proyectos de aeropuerto y puertos a gran escala como prioridad nacional.
Young Wook Chun es el embajador de Corea en Costa Rica.