No todo está perdido: una crítica a las noticias de sucesos

Costa Rica, en gran parte, sigue siendo un país de personas buenas, trabajadoras y optimistas

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La abrumadora ola de noticias negativas sobre los hechos que se dan en nuestro país tiende a inducir en muchas personas una visión pesimista de nuestra sociedad: ¡En realidad estamos mal en Costa Rica!

Y no es para menos; una buena parte de los telenoticiarios se extienden innecesariamente en detalles sobre las calamidades ocurridas. Nadie duda de que el país está enfrentando una avalancha de crímenes, asaltos, robos, accidentes, etc., como nunca, pero insistir en ellos con tantos pormenores, que hasta a veces resultan morbosos, solo sirve para formar una visión negativa.

Es cierto especialmente para la población cuya fuente de información consiste exclusivamente en estos noticiarios. Son personas que nunca recurren a otras fuentes de comunicación ni leen periódicos, y menos libros.

La forma como los noticiarios ofrecen las malas noticias al público es realmente criticable. La aparente complacencia en informar sobre el crimen, u otra desgracia, con exceso de detalles, que solo interesan a las autoridades, debería cambiar. De qué sirve informar de que la víctima falleció porque le fueron propinados 2, 4 o 12 disparos. Sería mucho más conveniente informar sobre el hecho brevemente, excluir tales minucias alarmistas y pasar a otro tipo de noticias.

Buenas noticias

Bien se sabe que no solo esto está ocurriendo en nuestro país; sin embargo, podemos señalar multitud de buenas noticias que cambiarían esa visión catastrófica.

En el país abundan noticias que bien ofrecidas cambiarían la visión pesimista que dan los telenoticiarios. Miles de estudiantes de primaria, segunda enseñanza y universidad asisten a sus lecciones llenos de entusiasmo por adquirir nuevos conocimientos y pretender un futuro más promisorio; es toda una legión humana que promete un futuro mejor en nuestra patria.

Cientos de mujeres y hombres trabajan todos los días buscando soluciones a multitud de problemas que nos aquejan, o bien, emprenden nuevos proyectos que mejoran su condición familiar.

Muchos científicos comprometen la mayor de su tiempo en descifrar más de un asunto aún no resuelto. Ya son muchos los investigadores costarricenses que han sido premiados en el exterior por sus valiosos hallazgos. Los agricultures madrugan, con una voluntad envidiable, todos los días para hacer producir la tierra y ofrecernos alimentos a todos.

Cientos de artistas se esfuerzan por conseguir nuevas formas de expresión que enriquecen nuestra cultura. Los lugares turísticos se multiplican y cada vez brindan nuevas atracciones al visitante.

¿Por qué no impulsar más este tipo de noticias que a todos nos llenan de satisfacción? A pesar de la elevada criminalidad, Costa Rica, en gran parte, sigue siendo un país de personas buenas, trabajadoras y optimistas.

edgars658@gmail.com

El autor es biólogo.