La gestión financiera de la CCSS

El déficit señalado por el informe de Auditoría no necesariamente se mantendrá

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

En relación con el editorial del periódico LaNación el 15 de marzo de 2011 y que hace referencia, entre otros aspectos al informe de Auditoría en el cual prevé un déficit de ¢41.000,00 millones en 2011, conviene comentar lo siguiente:

El informe de Auditoría de la Institución se denomina “Establecer estrategias a corto plazo para fortalecer la gestión financiera de la Institución” efectúa, entre otros, el análisis de los pagos a proveedores al 2 de febrero de 2011 y la deuda del Estado con la Caja al 5 de octubre de 2010.

Respecto a la cancelación de facturas, no ha sido práctica de la institución mantener saldos pendientes; lo acontecido obedeció a situaciones extraordinarias, derivadas de la imposibilidad de vender la cantidad necesaria de títulos valores al final de 2010, situación que fue corregida en el mes de febrero de 2011.

La institución canceló alrededor de ¢50.000,00 millones, lo cual supera casi el doble el promedio mensual.

La dinámica del servicio que brinda la CCSS, origina una afluencia continua de facturas que entran ocasionando un “stock” durante el tiempo de revisión y trámite de requisitos.

Gestión financiera. En cuanto a la gestión financiera, es normal y necesario realizar frecuentemente pronósticos y construir escenarios para ajustar los egresos a los ingresos reales, con más razón en las circunstancias actuales de la económica mundial, de país y, por lo tanto, de la Caja.

El informe de Auditoría aludido en el editorial se realizó en un momento dado y la situación expuesta no necesariamente persiste en el tiempo. La Gerencia Financiera mantiene un monitoreo permanente de las variables generadoras de ingresos, de la recaudación y los egresos, con el fin de alinearlos.

Para el año 2011 el Seguro de Salud cuenta con un presupuesto asignado de ¢1,3 billones para el financiamiento de bienes y servicios esenciales, como medicinas y vacunas, pago de subsidios, aparatos ortopédicos, material de apoyo en cirugías, servicios básicos y otros estrictamente relacionados con la atención al paciente, por lo que no hay afectación de los programas estratégicos de la institución.

La estimación de un posible saldo deficitario de recursos financieros por ¢41.000,00 millones representa 3,1% del presupuesto original, monto que se considera subsanable, tomando en consideración que, históricamente, en los últimos seis años, los porcentajes de ejecución de los egresos del Seguro de Salud son en promedio del 92,0%.

Por otra parte, la CCSS tiene para la generación de ingresos un equipo de profesionales en inspección y cobros que en forma permanente realizan acciones orientadas al aumento de cobertura contributiva y lucha contra la evasión, ahora apoyada por modernos instrumentos tecnológicos para la ubicación de patronos y trabajadores en todo el territorio nacional.

Conviene mencionar que en la época de crisis evidenciada desde el cuarto trimestre de 2008, cuando aumentó el desempleo, han sido estas labores las que han mitigado el impacto, posibilitando incluso crecimientos positivos, aunque en menor proporción que en años anteriores.

En el año 2010 se incorporaron 146.329 trabajadores. No obstante, el crecimiento neto en la facturación fue de 47.925 trabajadores; al respecto, hay que considerar que alrededor de 33.000 empleados laboran en forma ocasional durante el año (en su momento cotizan y luego no). Implica que 65.404 trabajadores entraron y salieron. Esto significó que se dejaron de percibir cuotas por el orden de¢32.373,4 millones.

El Estado paga. Contrario a algunas versiones infundadas que circulan con respecto al aporte estatal a la seguridad social, es justo reseñar el ingreso de recursos periódicos provenientes de las arcas públicas.

En todo momento ha existido disposición del Ministerio de Hacienda de cancelar las obligaciones contraídas producto de la atención a la población indigente y asegurados por el estado. Así, se recibieron recursos en 2009 y 2010 y se está en coordinación para lo que corresponde al 2011.

Respecto al servicio médico asistencial, aún se financia en forma solidaria, con porcentajes de contribución establecidos desde principios de la década de los 80 cuando no existían, ni la demanda, ni los requerimientos tecnológicos y de infraestructura actuales. Sin embargo; la institución ha evolucionado con el fin de estar en concordancia con los avances científicos, formación de especialistas, tecnología e inversiones en equipo e infraestructura del nuevo siglo.

En cuanto a los egresos, la Caja cuenta con lineamientos dirigidos a la adopción de medidas tendientes a racionalizar y disminuir el gasto en actividades no prioritarias y reasignar los recursos a aquellas que van dirigidas especialmente a la atención de los pacientes. Con esto se espera mantener el equilibrio financiero y garantizar el cumplimiento de los principios de economía, eficacia y celeridad en el uso de los recursos públicos.

La CCSS tiene sensores colocados en toda su estructura financiera, monitorea permanentemente, tanto al régimen de salud, como al de pensiones y con absoluta transparencia activa los mecanismos de previsión e implementa las acciones correctivas en aras del bienestar de la entidad, que según el criterio de los ciudadanos, es confiable y es la de mayor aporte a su calidad de vida.