Imnsa cumplió como supervisor

Daños en vía a Caldera son responsabilidad del MOPT, del CNC, y de Autopistas del Sol

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En los últimos días de marzo y los primeros días de abril, La Nación publicó una serie de reportajes en los que analiza diversos aspectos relacionados con la construcción de la vía San José-Caldera, emitiendo algunos juicios incorrectos y que afectan a mí representada, Imnsa Ingenieros Consultores S. A.

En abril del 2009 di a conocer la actitud negativa que mantenía, para con el Consorcio Supervisor Euroestudios Imnsa, el Consejo Nacional de Concesiones (CNC). Y esa insistencia de los funcionarios del CNC, del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y de la Contraloría General de la Republica (CGR), contra el trabajo de nuestro Consorcio Supervisor, hizo mella en la opinión pública, pero no impidió que realizásemos nuestro trabajo.

Advertencias. Los daños de la carretera han demostrado que las advertencias que hicimos durante el proceso constructivo de la carretera eran técnicamente correctas. Sin embargo, y a pesar de las aclaraciones que personalmente le expuse a doña Karla González mientras era ministra del MOPT, ella sigue insistiendo en que “'la sociedad supervisora carecía del personal, oficinas y vehículos necesarios para cumplir sus obligaciones contractuales'” ( La Nación , El País, 01/04/ 2011).

Por otra parte, La Nación titula uno de dichos reportajes afirmando “Vía a Caldera se construyó sin controles, pese a riesgos”, y en el que dice, refiriéndose a la inestabilidad de los taludes y a los hundimientos, que “la falta de supervisión y de correcciones oportunas agudizaron los problemas” ( La Nación , 28 de marzo del 2011). Sin embargo, la CGR (informe del 13 de setiembre del 2010), en forma evidentemente tardía reconoció que nosotros sí denunciamos oportunamente lo referente a la inestabilidad de los taludes.

Aclararé a continuación únicamente lo referente al gestor ambiental, dado que doña Karla González hace referencia explícita –y de forma equivocada– a este profesional. Afirma ella que “la falta de un regente ambiental le impidió a Imnsa detectar el riesgo e impedir la ruptura del acuífero de Barva, en La Guácima de Alajuela” ( La Nación , 01/04/2011). Valga aclarar que al regente ambiental le corresponde a Autopistas del Sol, mientras que la plaza que le toca al supervisor en esta área es la de gestor ambiental. Y resulta curioso que el regente ambiental nunca advirtió a su patrón –el concesionario– que se estaba afectando el acuífero de Barva, como era su obligación.

Como supervisores del proyecto emitimos una primera nota –relacionada con el acuífero de Barva--, el 24 de febrero del 2009, en donde comunicamos su afectación , en el momento en que la maquinaria pesada lo estaba cortando. Con la asesoría de nuestra gestora ambiental enviamos al CNC el oficio PSJC-330-09 del 20 de marzo de 2009, en donde le sugeríamos “que se requiera al concesionario las medidas ambientales que se han programado implementar para la protección de este valioso recurso hídrico y atender la reglamentación o disposiciones del Minaet”.

Con oficio PSJC-470-09, de fecha 22 de abril de 2009, debido a la falta de acción del CNC, les reiteramos el problema con el rompimiento de este acuífero. Debido a que se mantuvo la falta de respuesta por parte del CNC, con oficio PSJC-535-09 del 06 de mayo de 2009, generamos la ‘no conformidad 115-09’, con la cual denunciamos el rompimiento de este acuífero, y solicitamos la paralización de las obras en esa zona. Adicionalmente incluimos en esta inconformidad la evaluación del daño ambiental. Y fue la Ingeniera Hadda Muñoz, gerente del proyecto, con el oficio DAC-OF-1037/05-09, del 11 de mayo del 2009, quien recomienda a don Guillermo Matamoros no detener las obras solicitadas por Euroestudios Imnsa. Con esta acción de la Ing. Hadda Muñoz, el concesionario continuó dañando el acuífero de Barva, y vertiendo sus aguas en el cauce del río Segundo.

En este punto, mediante oficio ASA-970-2009-SETENA, del 20 de Abril de 2009, el Departamento de Auditoría y Medio Ambiente de la Setena solicitó a la Comisión Plenaria de la Setena, tanto la paralización del proyecto en las zonas en las que se estaban ocasionando enormes daños ambientales por parte del concesionario, como la apertura de un órgano director para la empresa encargada por el Concesionario para ejercer la regencia ambiental del proyecto.

El párrafo siguiente puede ayudar a los lectores a entender la tónica que nos tocó vivir como supervisores de la vía a Caldera hasta setiembre del 2009. “Más bien, la administración –el CNC– se ha enfocado en debilitar o deslegitimar la función de la supervisión, que debería ser su prioridad para proteger el interés público” ( La Nación , 28 de abril del 2009).

Los responsables. Se concluye entonces que los daños ocurridos son responsabilidad directa del MOPT, de su subsidiaria, el CNC, y de Autopistas del Sol. Además, la Defensoría de los Habitantes ya hizo una denuncia ante el Ministerio Público, lo cual va a facilitar la verificación de la responsabilidad que comparten Autopistas del Sol y el MOPT, por el mal estado de la carretera.

Nuestro Consorcio Euroestudios Imnsa sí cumplió con la supervisión de esta importante obra, pero no comparte responsabilidad alguna por los trabajos defectuosos ejecutados por Autopistas del Sol.