Desde el pasado martes 12 de noviembre, la Universidad de Costa Rica (UCR) realiza un foro institucional sobre el sistema educativo costarricense.
Sin duda, estas actividades son de particular importancia para considerar, desde diversas perspectivas, la problemática de la educación en el país y las posibles vías para fortalecerla. Precisamente por eso, sería fundamental que, como resultado de este foro, la UCR asumiera un compromiso público para impulsar acciones específicas que puedan contribuir a ese fortalecimiento.
Puesto que las acciones pueden ser numerosas y muy diversas, sería prioritario definir y delimitar un compromiso cuyo cumplimiento sea verificable. Por ejemplo, la UCR podría comprometerse, en el próximo quinquenio, a mejorar de manera significativa la preparación de los profesores de secundaria que gradúa, y a convertir esa meta en un proceso sostenido de largo plazo.
Formar profesores de secundaria de alto nivel sería un compromiso que la UCR podría asumir porque es la institución de educación superior pública que dispone de los mayores y mejores recursos: especialistas en diferentes áreas del conocimiento y una elevada inversión realizada en centros, institutos y unidades de investigación, y en programas de acción social.
A partir del presente foro o del VII Congreso Universitario (a efectuarse en marzo próximo), la UCR podría iniciar un proceso de cambio que comprendería tres pasos principales:
Primero, reorganizar las carreras que forman profesores de secundaria para que su administración sea asumida por las escuelas y departamentos que imparten la formación científica, técnica o artística de cada carrera.
En segundo término, cada una de esas escuelas y departamentos procedería a revisar y a actualizar los planes de estudio vigentes, y asumiría el compromiso de nombrar, en los cursos destinados a formar a profesores de secundaria, a sus mejores docentes, quienes deberían tener como mínimo un posgrado de una universidad reconocida y ser investigadores activos.
Por último, la UCR asumiría el compromiso de realizar evaluaciones periódicas de las carreras en que se forman los profesores de secundaria, y de dar seguimiento a los graduados.
De esta manera, la calidad de los profesores de secundaria que graduaría la UCR sería responsabilidad directa y principal de las escuelas y departamentos especializados en las distintas áreas del conocimiento, cuyo prestigio académico dependería, en una proporción considerable, de la excelencia con la cual formen a esos docentes.
Mediante un programa de formación de profesores de secundaria de alto nivel, la UCR podría sumarse también a otras iniciativas cuyo objetivo es desarrollar procesos de calidad en la enseñanza secundaria, entre las cuales destacan los colegios científicos, el colegio humanista, el bachillerato internacional y, además, el programa de acreditación de colegios por parte del Instituto Tecnológico de Costa Rica.