En su columna del pasado 28 de junio, Jorge Vargas Cullell propuso convertir el aeropuerto Tobías Bolaños en un parque recreativo, similar al parque La Libertad, en Desamparados, para disfrute de los vecinos de Pavas.
Lo anterior, cuando entre en operación el aeropuerto de Orotina y se dé el traslado del aeropuerto de Pavas a los campos donde está hoy el Juan Santamaría.
“Una buena idea sería utilizar el terrenos para construir un parque”, enfatiza don Jorge, y no dudo que surgirán otras propuestas tales como construir un nuevo hospital público para la zona oeste de San José o un gran complejo educativo que incluya kínder, escuela, colegio, educación técnica o parauniversitaria pública, o un centro cívico de edificios para los ministerios que lo necesitan. Incluso podría proponerse la construcción allí de una nueva casa presidencial.
La propuesta. No obstante la importancia de tales propuestas, quisiera anotar aquí una opción de carácter futurista, dada una necesidad tecnológica pronta a presentarse y en la cual nuestro país necesitará invertir recursos materiales de espacio físico e infraestructura: el desarrollo de la nueva tecnología de los drones.
En otros países, el uso de drones para el envío de documentos y otro tipo de paquetería, desde medicamentos hasta otros bienes de consumo, es generalizado, y es muy posible el pronto surgimiento de nuevos servicios.
Se espera que a mediano plazo su desarrollo lidere este sector de los envíos.
En el actual aeropuerto Tobías Bolaños sería posible desarrollar un parque tecnológico, tipo zona franca, para concesionar o arrendar terrenos a empresas de paquetería que podrían desarrollar sus operaciones dentro de un clúster instalado allí, lo cual permitiría generar gran cantidad de empleos tanto en manejo físico como en programación y automatización de sistemas.
Las condiciones actuales de dicho espacio favorecerían el manejo desde allí de gran cantidad de drones hacia cualquier parte del área metropolitana.
Nuestro país debe prepararse para esta necesidad, previendo la atracción de muchas nuevas empresas, por lo que el Consejo de Aviación Civil podría visualizar las necesidades de este sector, dadas las facilidades que podría ofrecer el desarrollo del actual aeropuerto bajo el nuevo concepto de dronopuerto, por lo que insto a este Consejo a crear las condiciones para el desarrollo de este nuevo campo tecnológico.