La CCSS distribuyó, en el 2010, medicamentos por un valor superior a los ¢110.000 millones. La rotación del inventario se sitúo en 3,8 veces; es decir, los medicamentos permanecen menos de tres meses en las bodegas de los almacenes y ello en un marco donde el costo total de la cadena de suministro se mantuvo prácticamente igual en el 2010 que el valor observado en el 2009. Repasemos cómo se logran estos resultados.
Enfoque integrado y sincronizado de la cadena de suministro : La creación de la Gerencia Logística permite integrar el trabajo, la comunicación y el manejo de información, tanto con los actores internos como los proveedores de medicamentos. Esto ha permitido implementar estrategias de compartir el riesgo de las operaciones logísticas.
Gestión de almacenamiento : El almacenamiento de los medicamentos en la CCSS está segmentado y fragmentado. Así, aproximadamente el 70% del inventario se encuentra almacenado en una empresa contratada, mientras el restante 30% en los almacenes institucionales. Este esquema genera altos costos, explicados por el pago del servicio de administración de inventarios y afecta la productividad de la preparación de los pedidos de las unidades de salud. A pesar de ello, la gestión de inventarios ha permitido reducir la facturación del servicio de administración del inventario por parte de DHL por ¢625 millones del año 2008 al 2010. Con el objeto de continuar reduciendo los costos de almacenamiento y mejorar la productividad del picking, la institución efectúa una licitación pública, con el propósito de disponer de una infraestructura logística de almacenamiento y distribución que permita consolidar y efectuar el despacho de productos minimizando aún más el almacenamiento; esto permitirá a la CCSS dedicar menos espacio al almacenamiento y más a las operaciones que incrementan el valor de la mercancía y reducción de costos.
Gestión de inventarios : A pesar de las limitaciones que impone el esquema de almacenamiento descrito, se ha implementado una política de inventarios que consiste en minimizar el inventario innecesario y aumentar la rotación. Así, la rotación del inventario a finales de diciembre se sitúo en 3,8 veces, un valor comparable con los niveles de rotación de las mejores cadenas de abastecimiento de medicamento a nivel mundial; así, según la empresa consultora AMR Research, este nivel de rotación es mejor o igual al obtenido por empresas como Novartis (2,1 veces), Johnson & Johnson (3,6 veces), Glaxo Smitkline (1,8 veces) y Pfizer, entre otras. El aumento en la rotación del inventario se ha traducido en una reducción del costo de oportunidad del capital inmovilizado, así como en un menor capital de trabajo invertido en inventarios. En términos muy simples, el enfoque actual consiste en que el inventario es “jalado” por la demanda. Paralelo a este resultado, durante el período 2006-2010, el inventario medio se logra disminuir en un 41%.
Gestión de la distribución : Los cambios anteriores se traducen en una distribución de medicamentos continua y un uso más intensivo del transporte; es así como se ha pasado de 2.000 entregas anuales a 6.300; ello ha permitido reducir el lead time logístico.
Disponibilidad de medicamentos : Todo este esfuerzo de gestión pública se concreta en mayor disponibilidad de medicamentos para los asegurados; así, para finales de diciembre del 2010 el porcentaje de abastecimiento de los medicamentos almacenables fue de 97,4%, y ello a pesar de que el nivel de recetas por habitante aumenta del 14,7 en el 2009 a 15,5 en el 2010. Este nivel de abastecimiento de medicamentos es superior al observado en países con similar ingreso per cápita.
En resumen, en los últimos años, la gestión de la cadena de abastecimiento ha logrado consolidar el derecho de los asegurados al acceso efectivo de medicamentos.