Cartas a la columna: Derecho a ver partidos

Fútbol debe ser declarado de interés nacional

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Me preocupa el rumbo que ha tomado el deporte más popular del país. Las transmisiones de los partidos de fútbol se concentrarán casi todos en una empresa de cable. Muchos no volveremos a ver los principales juegos de los equipos nacionales.

Desde hace tiempo, vienen sucediendo situaciones que, para mí, son anómalas en este deporte y nadie hace nada por resolverlas.

Le recomiendo a la Asamblea Legislativa establecer una comisión que investigue la restricción al acceso a los partidos en televisión y los declare de interés nacional, así como a los de la Selección Nacional.

Juan M. Rojas Brenes, San Ramón

Ciudad del caos

Cartago es un caos y no puedo comprender cómo, después de tantos años de estar al frente de la Alcaldía el mismo funcionario, no ha gestionado la reparación de las aceras, sobre todo para beneficio de las personas adultas mayores o con alguna discapacidad, y así mantener un buen ornato cantonal.

Se debe obligar a los propietarios de las aceras a repararlas, nivelarlas y corregir los huecos, que son trampas mortales para los peatones. Todavía hay dueños que no han cumplido con lo anterior en las cercanías del centro de la ciudad, lo que obliga al transeúnte a caminar por las calles y, en consecuencia, pone en peligro su vida.

Otro aspecto no resuelto durante todos estos años, y del que también es responsable el Ministerio de Salud, es la contaminación sónica. Me refiero al uso de altoparlantes en ciertos negocios. Entrar a un lugar de esos o caminar por el centro de la ciudad es un martirio. Lo mismo ocurre con los vehículos de perifoneo que transitan ofreciendo múltiples productos desde tempranas horas.

La Alcaldía nos debe la remodelación de la plaza mayor, lugar que no concuerda con la arquitectura de las ruinas de la parroquia y los alrededores.

Elsa Álvarez Granados, Cartago

Atasco por campaña

El viernes 24 de enero viajamos de Puntarenas a Chacarita (un trayecto de 10 kilómetros) y duramos más de una hora y diez minutos para llegar porque los seguidores de dos partidos políticos utilizaban el semáforo peatonal para ondear sus banderas en medio de la calle. ¿Dónde estaban las autoridades para controlar tal inconveniente?

Percy Piedra Alfaro, San Isidro de Heredia

Alivio para choferes

Hace algunos años, ir y venir de Orotina y otros lugares aledaños era un martirio. Las filas vehiculares en el monte del Aguacate sacaban de sus casillas a choferes y acompañantes. Vino la apertura de la ruta 27 y el temido viaje se acortó, con el consabido ahorro de combustible y estrés.

Quienes viajamos por las diferentes autopistas nacionales vemos que es la única que tiene mantenimiento constante y a la vista. En buena hora se anunció la ampliación de la carretera bajo el mismo modelo, pues su costo recaerá en la concesionaria y será pagada únicamente por los conductores que la utilicen.

Egidio Vargas Durán, Santo Domingo de Heredia

Lista vinculante

La discusión sobre la metodología para calificar a los aspirantes a magistrados y sobre si el voto debe ser público es cosa de nunca acabar. Lo que puede observarse es la contradicción del sistema: la Asamblea Legislativa confía en la Comisión de Nombramientos para seleccionar los mejores candidatos, pero también desconfía al reservarse la facultad de elegir alguno que no haya participado en el concurso. Esto es legal, pero entraña un contrasentido.

El trabajo de la Comisión es arduo. Construye la metodología, analiza los atestados, hace entrevistas y compara los resultados para formar la lista de los recomendados. Es un proceso de gran costo.

¿Qué valores prevalecen en la confianza depositada por la Asamblea Legislativa en la Comisión de Nombramientos? Si es la soberanía, no la pierde por el hecho de elegir a una persona de la lista recomendada. Hacer lo contrario es confundir la soberanía con la arbitrariedad. Y esta lesiona no solo la dignidad de los miembros de la Comisión, sino también los esfuerzos de los aspirantes.

Una medida conforme a derecho sería que la lista de candidatos recomendada por la Comisión fuera vinculante para el plenario, el cual elegiría a uno de ellos o, en su defecto, desecha la lista en una votación motivada y ordena un nuevo concurso.

Galo Vicente Guerra Cobo, San José