Brasil adopta medidas para mejorar competitividad

El gobierno de Dilma Rousseff favorece la confianza empresarial y de los consumidores

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Recientemente, el Gobierno brasileño anunció el Programa de Inversión Logística para carreteras y ferrocarriles, asumiendo un fuerte compromiso para fortalecer la competitividad del país. Las medidas buscan ampliar las inversiones en infraestructura de transporte terrestre por medio de concesiones a empresas privadas, otorgando el derecho de administrar diferentes tramos de carreteras y ferrocarriles, con el fin de disminuir el retraso en infraestructura.

La inversión total prevista durante 25 años es de R$133.000 millones (el valor de un real es de ¢244), cuya distribución se realizará de la siguiente manera: R$79,5.000 millones se invertirán en un periodo de cinco años; destinándose R$ 23,5.000 millones para carreteras y R$56.000 millones para ferrocarriles. El monto restante, que corresponde a R$53,5.000 millones, se invertirá en los próximos veinte años, distribuyéndose R$18,5.000 millones para carreteras y el remanente para infraestructura ferroviaria.

En lo referente a los R$ 23,5.000 millones que se invertirá en carreteras, el Gobierno planea otorgar concesiones al sector privado para la gestión de siete mil quinientos kilómetros de autopistas. Las primeras autorizaciones que se asignarán a las empresas privadas para la construcción de autopistas, están inicialmente previstas para finales de 2012 y principios de 2013. La duración de la mayoría de las concesiones será de 25 años.

Licitantes ganadores serán los que se ofrezcan a cobrar peajes más bajos. Los adjudicatarios también tendrán que llevar a cabo las inversiones programadas en los tramos de carretera en régimen de concesión. El financiamiento para las inversiones por realizar por los concesionarios será proporcionado por medio del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) a la tasa activa a largo plazo (TJLP), fijada actualmente en 5,5% anual, más una comisión de administración de hasta 1,5%. El programa propone un periodo de gracia de tres años para los prestatarios y la amortización de hasta veinte años.

Para los ferrocarriles, se otorgará la concesión de 12 tramos que abarca diez mil kilómetros, la cual se transferirá en el marco del Programa de Inversión Logística. Asimismo, el Gobierno brasileño proyectó la planificación de las inversiones, en este sector, durante los próximos 25 años por un total de R$91 mil millones, de los cuales R$56 mil millones se desembolsarán en los próximos 5 años.

El modelo de concesión adoptado para los ferrocarriles consistirá en asociaciones público-privadas (APP), en donde el Gobierno federal se encargará de la construcción, mantenimiento y operación de la vía férrea. Valec Engenharia, Construções e Ferrovias (corporación propiedad del Gobierno) adquirirá la capacidad de transporte total, la cual entregará a los agentes privados interesados, por medio de una oferta pública. La capacidad de acarreo por ferrocarril se venderá a los usuarios que quieran transportar su propia carga, a los operadores independientes y concesionarios ferroviarios de transporte.

Además de las medidas adquiridas en relación con la infraestructura de transporte, es posible que las tarifas eléctricas se reduzcan, situación que contribuiría a la disminución de los costos de producción en Brasil, especialmente en sectores que dependen más fuertemente de la energía.

Junto con otras medidas anunciadas en los últimos meses, estos proyectos harán que el país sea más competitivo mediante la reducción costo de transporte y producción. El calendario anunciado sugiere que el impacto directo de las inversiones probablemente no se sentirá hasta después de 2013. La respuesta del gobierno de Dilma Rousseff favorece el aumento de la confianza empresarial y de los consumidores, lo que ayudaría a alcanzar una anticipación de los beneficios de estas medidas en términos de una reanudación de la actividad en los próximos años.