La primera vicealcaldesa de Alajuela, Dinorah Barquero Barquero, recibió un plus de ¢904.531 por mes por concepto de prohibición pese a no tener el título de licenciatura.
El beneficio representa un 65% más del salario, lo que subió su sueldo a casi ¢2,3 millones por mes. La funcionaria asumió funciones el 7 de febrero anterior.
El municipio detectó este pago cuando el Departamento de Recursos Humanos revisó los salarios de los alcaldes, a petición de la Contraloría General de la República.
Dinorah Barquero enfatizó ayer que todo se trató de un error.
“Me di cuenta de esto anteayer (el lunes). Nunca se me dio una acción de personal, me pagan con un cheque donde dice el monto total”, aseguró la funcionaria.
En su criterio, el mayor perjuicio es a para ella, porque tras recibir “plata de buena fe” ahora se la van rebajar.
Sobre sus estudios universitarios, Barquero se identificó como “técnica profesional en el área de Derecho”. Además, dijo que le faltan “como” tres materias y la tesis para obtener la licenciatura en esa misma rama.
“En mi currículo (presentado a la Municipalidad) se dicen los puestos que he ocupado pero no he acreditado ninguna información de que soy abogada”, alegó.
Ante la situación, el alcalde Roberto Thompson ordenó el martes corregir el sueldo de Barquero e iniciar un procedimiento administrativo para determinar la suma pagada de más para que sea reintegrada al municipio.
Entre tanto, la Contraloría General de la República confirmó, mediante la oficina de prensa, que recibió ayer una denuncia sobre este caso, la cual está en la etapa de admisibilidad.
En ese mismo municipio, pero en el año 2000, fue separado del cargo el alcalde Jorge Ernesto Ocampo por cobrar dedicación exclusiva por una licenciatura en derecho que no tenía, según la Fiscalía.