El Tribunal Ambiental Administrativo investiga posibles daños ambientales en la construcción de la nueva carretera entre Sifón de San Ramón y la Abundancia de San Carlos, Alajuela.
Los jueces investigan el aparente mal manejo de escombreras, caída de materiales en los cauces de los ríos y tala de árboles.
Según la jueza Yamilette Mata, vicepresidenta del Tribunal, hubo una denuncia puntual por una supuesta afectación de un cauce de río en San Ramón y el mal manejo de una escombrera.
Sin embargo, el Tribunal resolvió abrir una investigación de oficio que cubra todo el recorrido del proyecto, de 30 kilómetros.
Durante la primera inspección del Tribunal, el mes pasado, se encontraron problemas con los depósitos de escombros, dijo Mata.
La jueza alegó que solo pudieron inspeccionar la mitad del trayecto, desde Sifón de San Ramón, pasando por el cauce del río Espino –que es el limite territorial con San Carlos– hasta quebrada Yeguas.
Por ahora, los jueces no han emitido ninguna medida cautelar contra la empresa responsable de las obras, la constructora Sánchez Carvajal.
Mata sostuvo que no se tomaráninguna decisión al respecto hasta que se realice una segunda inspección, prevista para dentro de 15 días.
En esa inspección también participarán miembros de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena) y de la Asociación pro Carretera de San Carlos.
Aprovechamiento de piedra. Entre otras cosas, también se indagará si la constructora tiene los permisos para la extracción y explotación de materiales de los cauces de varios ríos del trayecto.
El viernes se intentó obtener el criterio del ingeniero responsable del proyecto, Mario Marín Rivera, pero alegó que tenía problemas de señal celular y colgó el teléfono.
Patricia Romero, miembro de la Asociación pro Carretera, aseguró que ya pidieron explicaciones por los aparentes problemas ambientales y que, de momento, están satisfechos con las respuestas aportadas por el MOPT.
Por su parte, Francisco Jiménez, ministro de Transportes, confirmó que la constructora está obligada a presentar un plan de mitigación del impacto ambiental.
Lo anterior, entre otras cosas, para mejorar el manejo de los escombros, ahora que el proyecto aumentó de dos a cuatro carriles.
Mata manifestó su preocupación precisamente por la gran cantidad de materiales que aún falta por movilizar en esa ruta.
Si el plan de trabajo avanza según lo previsto, todo el recorrido de 30 kilómetros y los nueve puentes estarán listos a principios del año 2014. Colaboró Carlos Hernández, corresponsal.