Si usted creía que en la autopista General Cañas ya había pasado de todo, estaba equivocado.
Desde ayer y hasta el próximo martes el paso estará cerrado por el colapso del puente bailey , en el sentido Alajuela-San José.
La Policía del Tránsito aparte de hacer esfuerzos por regular el paso de los vehículos, pidió a los conductores paciencia durante los próximos días.
“Es una situación difícil. No contábamos con esto, pero, bueno, a los conductores les pedimos tener mucha paciencia y hacer uso de las rutas alternas a la General Cañas y así evitar mayor caos”, manifestó Diego Herrera director de la Policía del Tránsito.
La General Cañas estará cerrada desde el cruce del aeropuerto Juan Santamaría hasta las cercanías del Conservatorio Castella.
Si usted hace uso de esta vía para viajar a la capital, el Tránsito recomendó en primer lugar viajar por la ruta a Caldera.
Es decir, usar la radial El Coyol por la ruta 27, que lo comunica con el sector de Santa Ana y luego Escazú, para llegar a San José por la zona de La Sabana.
Otra opción es esta ruta: pasar por el puente Francisco J. Orlich, Cenada, Texaco y Jardines del Recuerdo hasta San José.
O bien, llegar a la radial Santa Ana-Belén, luego al Conservatorio Castella y puente Juan Pablo II.
Además, ayer el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) manifestó que estaría ampliando los horarios del tren a Heredia, los cuales daría a conocer hoy.
Pronta reparación. Pedro Castro ministro del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), y José Luis Salas, director ejecutivo del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), prometieron apresurar las obras para abrir el paso si se puede antes del martes.
“Ya se coordinó con la empresa constructora para que se trabaje las 24 horas y acelerar el paso de los trabajos. Si el clima nos permite, podríamos incluso antes del martes tener el paso abierto o por lo menos a las cinco de la mañana de ese mismo día”, dijo Castro.
Entre tanto, Diego Herrera, director del Tránsito indicó que se mantendrá paso regulado y la presencia de oficiales en ese punto de la autopista, así como en las principales vías alternas.
“La vigilancia es total. El objetivo es bajar el impacto de este cierre y perjudicar menos a los conductores”, indicó Herrera.