La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) espera ahorrar en el pago de fletes a buques petroleros con el dragado de su muelle en Limón que concluyó este jueves.
Con esa medida será posible el arribo de barcos con combustible que sean de mayor calado o cargados a su plena capacidad.
Solo en los últimos cinco años, el atraso en la limpieza del muelle petrolero le han costado al país unos $17 millones por concepto de mayores costos de transporte.
El trabajo consistió en la remoción de más de 1,2 millones de metros cúbicos de sedimentos para aumentar en un 15% la profundidad del puerto. Tuvo un costo de $13,8 millones.
El dragado fue una de las tareas prioritarias de la nueva administración de Recope, a cargo de Jorge Villalobos. Fue realizado por la empresa holandesa Van Oord Dredging and Marine Contractors BV.
Recope informó de que en los próximos días su personal trabajará en la batimetría, que es levantamiento topográfico de la profundidad en el lecho marino.
Los resultados de esa labor se entregarán a la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) y al Ministerio de Obras Públicas y Transportes para que habiliten el muelle para barcos más grandes y ubiquen las boyas que delimitan el canal de acceso.
Los materiales retirados se depositaron cuatro kilómetros mar adentro, en un lugar preestablecido en el estudio de impacto ambiental aprobado por la Secretaría Técnica Nacional Ambiental .