Con la titulación de los terrenos, el apacible pueblo de Purisil en Orosi, Cartago, ahora sueña con desarrollar el comercio y la atracción del turismo.
Muchos de los nacidos en este pueblo ya empiezan a garabatear ideas en sus cabezas.
Julio Torres, activista vecinal, sostuvo que la normalización de sus terrenos les permitirá sacar prestamos para desarrollar proyectos que les permitan captar parte de los visitantes que llegan al Parque Nacional Tapantí.
“La idea es tener tramitos y ofrecer más a los turistas para que se detengan aquí y generen ganancias ”, afirmó Torres.
Actualmente, la mejor época de trabajo en Purisil va de setiembre a febrero, con la recolección de café.
El resto del año, las labores son esporádicas, dependen de lo que pidan los dueños de las grandes fincas cafetaleras.
“Preguntá por trabajo para mi hijo. ¿Habrá algo allá en la finca?”, preguntó Elizabeth Quesada a uno de los campesinos que pasaba al frente.
Un jornalero de tiempo completo gana en Purisil entre ¢45.000 y ¢48.000 por semana.
El Centro de Educación y Nutrición (CEN) del lugar contribuye con la alimentación de los niños menores de 6 años y las mujeres embarazadas.
El servicio de bus público se da entre 4 y 5 veces al día. Y el único comercio del pueblo es una pequeña pulpería.
“Aquí hay muchas iniciativas para no solo depender de las jornadas de las fincas de café”, mencionó Torres.
Atraer desarrollo. Jorge Rodríguez, alcalde de Paraíso, dijo que ya envió solicitudes al Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) para asfaltar la carretera desde Río Macho hasta Purisil, de unos 2,5 kilómetros.
“Una ironía: se tiene el Parque Nacional más grande, pero no recibe beneficios”, dijo.