Por cada dos parejas que dieron el sí ante un altar o frente a un notario en el 2011, otra firmó la disolución de su enlace matrimonial.
Así se desprende de los datos divulgados ayer por el Registro Civil, órgano adscrito al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Según ese reporte, el año pasado se oficiaron 25.021 uniones matrimoniales y 12.592 divorcios, el mayor número de rompimientos registrado hasta la fecha.
En cuanto a los matrimonios, aunque el año recién pasado se dio un leve crecimiento respecto al 2010 (3,8%), la cifra récord de enlaces de pareja continúa siendo la del 2009, con 27.130 casamientos.
Asimismo, se mantiene la tendencia de los costarricenses de inclinarse más por las uniones civiles que por las católicas.
De los 25.021 matrimonios inscritos el año pasado, 18.325 (75%) fueron civiles, 6.263 católicos y 433 se realizaron en el extranjero.
En la última década, el Registro Civil reporta 102.685 divorcios al tiempo que se inscribieron 268.349 casamientos.
Para la antropóloga de Enfoque a la Familia, Tania Brizuela, las metas personales y profesionales han hecho que muchas personas posterguen la decisión de casarse y de formar una familia.
“Ahora la población busca un mayor grado de estudio académico para tener una mejor calidad de vida en cuanto a lo material”, declaró Brizuela a ADN Radio 90.7 FM.
Acudir a un abogado, en vez de a un sacerdote, también es una práctica creciente. Ya para el 2001, de los 22.868 matrimonios, 13.928 fueron civiles y solo 8.648 católicos.
Según Brizuela, por los costos que implica un matrimonio por la Iglesia, algunas personas prefieren casarse por lo civil y luego hacer una ceremonia religiosa.
En cuanto a las disoluciones, la cifra del año pasado supera en un 8,22% (1.036) a las del 2010.
La mayoría de los rompimientos del 2011 se dieron en setiembre, con 1.519. Le siguen marzo y mayo, con 1.222 y 1.215, respectivamente.