¿Cómo explica que una entidad que trabaja bajo el principio de servicio al costo tenga un superávit acumulado de más de ¢9.000 millones?
Esta institución trabaja con un presupuesto que se financia con canon. Ahí se incluyen todos los proyectos que, se supone, se van a ejecutar al año siguiente. Eso no quiere decir que todo lo que se presupuesta se tiene que gastar.
”Al final de cuentas, a veces es lamentable que no se ejecuten algunos gastos que son necesarios, pero la mayor parte de las veces es deseable que aquellos que no había necesidad de hacerlos no se hagan. Yo no se por qué ahora a la gente se le ha metido que tener un superávit es malo”.
En una institución como la Aresep que se financia con cánones, los cuales a la vez se pagan con tarifas, ¿cuál es el sentido de tener un superávit?
Bueno, eso tiene mucho sentido. Para el usuario es mejor que, en la medida de lo posible, no se gasten los recursos de cánones simplemente por gastarlos.
Sí, siempre y cuando no se le cobre al año siguiente. Lo que dice la Auditoría es que, si ese dinero no se gasta, se debe devolver al servicio y a la empresa. A la vez debería reflejarse en las tarifas.
Cierto.
Si Aresep acumula ese monto (¢9.338 millones), es porque cada año sigue cobrando ese tributo, aunque no se gaste.
Eso no es así. Cada año se va devolviendo el canon a los prestadores de los servicios públicos.
La Auditoría Interna dice que eso no se ha devuelto o aplicado.
No. El canon del 2010 se devolvió totalmente desde el año pasado.
¿Cuánto devolvieron?
Unos ¢ 4.000 millones, aproximadamente.
¿A quiénes se les devolvió?
A cada una de las actividades reguladas. Cada presupuesto se independiza por actividad, se ve en cuáles no se ejecutaron los gastos y, de acuerdo con eso, se devuelve. A la hora de definir las tarifas, las empresas no deben incluir ese gasto.
Si están haciendo esa devolución, ¿cómo es que el superávit continúa acumulándose?
Hay muchas razones por las cuales eso se da. Acordate de que no siempre gastar es bueno.