Mario Badilla asumió el Consejo de Transporte Público desde octubre del 2010. Le ha tocado lidiar con una entidad que tiene pocos recursos y muchas obligaciones.
Aun así, defiende el trabajo que se hace, descarta una intervención superior y aboga por más personal, para poder responder a todas las obligaciones.
Los porteadores exigen que se intervenga el CTP. ¿Es necesario?
No.
¿Por qué?
Porque estamos hablando de porteo. Si es específicamente por los argumentos que están señalando los señores que no acreditaron (que no obtuvieron permisos especiales de taxi), yo les diría que tengan paciencia y que no irrumpamos el orden público y permítanme que, a través del debido proceso, que abogados de asuntos jurídicos revisen sus alegatos, sobre la no acreditación . Y si tienen razón, le recomendaríamos a la Junta Directiva que revoque la no acreditación. Si es al contrario, que consideramos que estaba bien rechazada la acreditación, esto se va a elevar al Tribunal Administrativo de Transportes.
¿Don Pedro Castro le ha advertido de que una intervención es posible?
No, esto lo escuché de estos señores no acreditados (Citó a Yuribeth Méndez y a la Federación Nacional de Porteadores, Fenapo).
Y en este momento de críticas, ¿hay denuncias de corrupción?
Hay una, que presentó un representante de taxistas.
¿Qué dice la demanda?
Lo que está hablando es que el Consejo no podía acreditar (dar permisos especiales de taxi) por las dos acciones de inconstitucionalidad que había interpuesto (la porteadora) Yuribeth Méndez.
¿Para usted cuál es el verdadero problema en el CTP?
Nosotros tenemos que reorientar en materia de recursos, para poder adecuar la demanda de servicios que tenemos, con los recursos que necesitamos para enfrentar eso.
De las 49.000 gestiones recibidas en el 2012, ¿a cuántas es posible responderles en el mismo año?
No lo tenemos tabulado ahorita. Te digo, tenemos que salir con todos los permisos de estudiantes antes de que se inicie el curso lectivo, tenemos que tener 3.000 permisos. En turismo tenemos que estar al día porque sino el ICT (Instituto Costarricense de Turismo) se nos viene encima con las autorizaciones que hace y con trabajadores. Igual pasa con el Comex. Colaboró la editora Irene Vizcaíno.