El Consejo Nacional de Rehabilitación y Educación Especial (CNREE) denunció ayer la liberación del presunto violador de una mujer con retardo mental.
El pronunciamiento se efectuó tras conocer que la jueza Gabriela Saborío rechazó la solicitud de la Fiscalía, de seis meses de cárcel, para el sospechoso, pese a que ofreció disculpas a los familiares de la víctima durante la diligencia judicial.
Aunque el Ministerio Público advirtió que, por su discapacidad, la afectada no tenía la posibilidad de dar su consentimiento, la jurista consideró que la mujer no fue sometida a la fuerza.
Por su parte, el director ejecutivo a. í. del CNREE, Rodrigo Jiménez, envió una carta a Saborío, en la cual manifiesta que “la omisión de imponer al agresor una medida cautelar más severa resulta odiosa e injustificada”.
Jiménez añade que las mujeres con discapacidad son “cuatro veces más vulnerables a la violencia sexual”, y que en situaciones como esta es común que no haya rastros físicos por el control que el agresor ejerce sobre la víctima.
Asimismo, pidió una reflexión sobre el hecho y le hizo un llamado al Poder Judicial para que se revise el fallo emitido.
“No podemos darnos el lujo de permitirle a alguien que violó a una persona con discapacidad que simplemente pida disculpas y siga como si nada hubiera pasado”, expresó Jiménez.
“Es una mujer con discapacidad en una zona rural y ahora víctima de una violación. Imagínese la discriminación a la que va a ser sujeta”, recalcó.
Ataque. Los hechos acusados ocurrieron el 10 de enero en horas de la mañana, cuando la mujer se encontraba sola en la casa de sus padres.
Según la madre de la víctima, el hombre, que es vecino de la familia, regresó a la casa cuatro días después del ataque y, cuando ella lo amenazó con llamar al OIJ, él reconoció que lo había hecho.