Los $8 millones donados por China durante la visita de la presidenta Laura Chinchilla, a mediados de agosto, no eran de uso discrecional como lo anunció el Gobierno.
Es decir, Costa Rica no podrá disponer unilateralmente de los fondos ofrecidos pues su uso está condicionado al visto bueno del Gobierno de Hu Jintao.
Anoche, el Gobierno aclaró que los fondos son parte de la donación de $25 millones hecha por China para levantar una Escuela Nacional de Policía en Pococí. Este es un proyecto llave en mano, donado y construido por China.
El destino de los $8 millones se despejó cuando el Gobierno tico intentó utilizar los recursos para atender la emergencia del terremoto del pasado 5 de setiembre en Nicoya, Guanacaste.
Así lo reconocieron ayer representantes del Poder Ejecutivo, quienes alegaron que hubo una confusión y que los fondos solo irán a la Escuela Nacional de Policía.
“Lo que ahora aclara China es que debe usarse como tracto inicial de la construcción de la Academia (de Policía)”, dijo anoche Marco Vinicio Ruiz, embajador de Costa Rica en Pekín.
Simultáneamente, Francisco Chacón, ministro de Comunicación, dijo en San José “que la mayor parte de esos $8 millones van a tener que ser para la Academia Nacional de Policía”.
El destino fue aclarado por el delegado comercial chino en Costa Rica, Mao Furong, en una reunión con el vicecanciller Carlos Roverssi, pocos días después del sismo.
El tema salió ayer a luz en una publicación de radio Reloj en la cual se dijo que los $8 millones no existían.
¿Confusión? Las aclaraciones ofrecidas ayer por los representantes del Ejecutivo contradicen la primera interpretación dada por la presidenta Chinchilla en China.
La noche del 16 de agosto, luego de reunirse y cenar con su homólogo chino, Hu Jintao, Chinchilla dijo que la cita había superado sus expectativas pues China había hecho una donación no reembolsable y “sin ningún tipo de condición”.
La declaración la hizo a eso de las 9 p. m. en una de las salas adjuntas a su suite en el hotel Diaoyutai State Guesthouse, acompañada del canciller, Enrique Castillo, la ministra de Comercio Exterior, Anabel González, el embajador Marco Vinicio Ruiz y el director de prensa, Mario Aguilar.
Los fondos, explicó la mandataria, se usarían para financiar los proyectos que el Gobierno definiera, según sus prioridades.
Ella habló de cerca de $10 millones. Sin embargo, el embajador corrigió que se trataba de 50 millones de yuanes, cerca de $8 millones.
Incluso, el 28 de agosto y ya en Costa Rica, la mandataria informó de que como parte del seguimiento a los acuerdos suscritos con China, se estaba analizando el uso que se le daría a los $8 millones con el fin de aprovecharlos de la mejor manera.
Anoche el canciller Castillo reconoció desde Nueva York que durante el viaje él también interpretó, como lo hizo la presidenta, que la donación no estaba condicionada a una obra específica.
“Si sé que tanto la presidenta como yo tuvimos esa misma impresión. Incluso, lo conversamos y ella me preguntó: ‘¿En qué quedamos. Esta plata para qué es?’. Y yo le dije, porque yo lo escuché decir, que esto es para gastos discrecionales de proyectos futuros (...) Después empezaron a aparecer aclaraciones”, dijo el canciller.