Fuerte oleaje impide a buques petroleros atracar en Limón

Refinería aún no sabe si pedirá aumento para cubrir costos adicionales

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El fuerte oleaje que afecta al Caribe, desde hace un mes, obliga a la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) a enviar los buques que transportan combustible a Panamá, ante la imposibilidad de atracar en Moín.

El proceso implica, además, la subcontratación de barcos pequeños que realizan labores de aligeramiento (hacer menor la carga) y traslado de parte del combustible al país.

Así lo explicó, la gerenta de Recope, Gabriela Montes de Oca, quien aseguró que todo está bajo control. Añadió que el proceso de aligeramiento de barco a barco es normal cuando el oleaje impide que los buques de gran calado ingresen.

Montes de Oca explicó que, en este momento, es muy prematuro saber si habrá un sobrecosto por estos inconvenientes, pues es la primera vez que la afectación se da durante un periodo tan extenso.

El problema del oleaje se inició la segunda semana de junio y hasta la fecha habría afectado, al menos, cuatro buques.

De estos, aún permanece en bahía una embarcación que transporta gasolina, la cual llegó desde el 16 de junio. Otras dos naves arribaron el 26 de ese mismo mes y fueron enviadas a Panamá para las labores de aligeramiento y tenían como fecha de zarpe el 10 y 15 de julio. Entre tanto, el primer buque en sufrir los problemas y que arribó el 11 de junio, finalmente logró zarpar el jueves 9 de julio (casi un mes después).

Según la gerenta de Recope, el costo adicional que podría implicar este problema dependerá de los reclamos que puedan presentar los proveedores.

La funcionaria no descartó que el hecho de tener que contratar barcos pequeños para realizar el aligeramiento, represente un costo que sea trasladado a los consumidores.

“Esto es algo que se debe analizar en el contexto global de las demoras y que depende de la magnitud, por lo que podría implicar un porcentaje muy bajo dentro de la factura petrolera”, comentó Montes de Oca.

Por dos vías. Para Juan Manuel Quesada, intendente de Energía de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), las acciones de Recope responden a su obligación de garantizar el abastecimiento .

“Si Recope para cumplir con esa obligación debe hacerlo de esas otras formas, perfectamente pueden hacer esa valoración y, eventualmente, si eso implica un costo adicional, serán ellos los que tienen que solicitar un ajuste de tarifas, justificando esos costos y es nuestro deber analizarla con la rigurosidad del caso”, manifestó.

De darse un incremento en los costos, añadió Quesada, la legislación le da a Recope dos vías para trasladar esos rubros a los usuarios.

Por un lado está la solicitud de ajuste extraordinario, que se aplica cuando existen variaciones importantes en el entorno económico por caso fortuito o fuerza mayor, o cuando se cumplan las condiciones de modelos automáticos. De ser así, debe justificar la petición.

Por otro, está el ajuste ordinaria que sería el procedimiento para el cual se somete la petición a audiencia pública.