Escoger un arreglo floral, comprarlo y pagarlo desde la comodidad de la casa u oficina es una facilidad que Costa Rica Flores.com ofrece a sus clientes, pero no todos la aprovechan.
Esta pequeña empresa familiar tiene su sede física en San Pedro de Montes de Oca, pero en la web su presencia es tan amplia como el acceso que los clientes puedan tener a la red de Internet.
Eso permite que sus arreglos florales estén a solo un clic de quienes viven en San José o muy lejos de nuestras fronteras.
La pequeña floristería se publicita en el buscador de Google. Aunque, según su propietaria, esto representa una fuerte inversión, también es un gran aliado.
La tienda tiene facilidades para hacer todo el trámite de selección, pedido y pago en línea.
Esto último puede hacerse mediante tarjeta de crédito o con una transferencia bancaria.
Lo único que debe hacer el cliente es ingresar al portal web y llenar un formulario con sus datos y los del destinatario.
Una vez entregadas las flores, el comprador recibe una notificación con el detalle de la entrega.
Pese a ese servicio en línea, la tienda no deja de recibir llamadas y la visita de los clientes.
Lorena Delgado, propietaria del negocio, dijo que los pedidos por Internet los hacen mayormente los extranjeros o costarricenses radicados fuera del país.
“La gente en Costa Rica es más comedida para comprar por Internet. Aunque ven toda la información en la página web, nos llaman por teléfono o vienen a la tienda porque les gusta el trato personal”, comentó Delgado.
Otro problema, según dijo, es que se equivocan mucho a la hora de llenar una sencilla fórmula para hacer el pedido.
A pesar de esto, la empresaria sigue apostando a las herramientas tecnológicas, pues sabe que es un tema generacional.
“Los más jóvenes se arriesgan más a las transacciones en línea y a eso vamos en el futuro”, afirmó.
En su criterio, la tecnología ofrece ventajas que los comercios no aprovechan por no invertir o porque no le dan importancia.
Según manifestó, el solo hecho de tener el negocio en la web ha sido una gran ventaja, pues le permite promocionarse.
La floristería también cuenta con un registro digital de clientes y proveedores, y la mayoría de pagos se hacen por Internet.