Si alguien puede dar testimonio de que el comienzo oficial del servicio de tren ayer entre San José y Belén de Heredia fue desordenado, es Rodrigo Chaves Sánchez, un electromecánico de 55 años de edad, vecino de La Aurora de Heredia.
Él fue una de las decenas de personas que se aventuraron a usar el tren para medir tiempos de viaje hacia la capital y así valorar esa nueva opción como medio para ir al trabajo o al lugar de estudios.
Chaves arribó a la estación belemita antes de las 7 a. m., con la idea de llegar a su trabajo, en Pavas, media hora después, según su propia estimación y por el tiempo que el Incofer informó tardaría el viaje.
Según expuso, se basó en una versión del horario que tendría el tren, pues el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) lo informó tarde el día anterior. El tren partiría a San José a las 7:20 a. m.
“No importa, igual voy a esperar para medir el tiempo”, dijo mientras aguardaba en la acogedora estación belemita, de estilo victoriano y remodelada con ¢74 millones.
La locomotora partió a la capital a la hora indicada con ejecutivos, estudiantes y adultos mayores.
Hasta ese entonces ni Chaves ni ningún otro pasajero tenía quejas del servicio: vagones impecables, compra sin demora del tiquete y un día soleado parecían un buen augurio... pero no lo fue.
A mitad de viaje los usuarios sufrirían la descoordinación de tiempos que se generaron por la impuntualidad de otras locomotoras que comparten la vía férrea.
Incofer había dicho que todo estaba coordinado para que en un aparcadero en Pavas, los trenes que procedían de Montes de Oca y de la estación al Pacífico se encontraran por igual para hacer una sencilla maniobra de ceder la vía y luego continuar cada uno su trayecto.
En la práctica eso no sucedió: la locomotora que salió de Belén debió esperar durante 15 minutos a que apareciera el otro tren.
Mientras la espera se extendía, allí estaba Rodrigo Chaves pidiendo “puerta”. ¿La razón? Además del atraso, el maquinista olvidó hacer la parada en la compañía Jack’s, precisamente la de Chaves.
Ante la insistencia, el personal del tren abrió las puertas y Chaves saltó del tren hacia la otra línea férrea y corrió rumbo a su trabajo.
A las 8:07 a. m., luego de 45 minutos, el tren de Belén terminaba su tercer viaje a la capital.
Afectación. El arranque del tren belemita no tuvo toda la acogida esperada por el Incofer, entidad que reconoció que fue la incertidumbre del lunes sobre los horarios la razón por la cual muchos se decidieran por dejar guardado el carro o prescindir del autobús.
Miguel Carabaguíaz, presidente ejecutivo de Incofer, aseguró que todas las fallas presentadas ayer serían corregidas de inmediato.
El “cruce” de trenes en el aparcadero de Pavas fue el tema que mayor problemas dio al Incofer, afirmó Carabaguíaz.
Incluso, insistió en que esa situación se presentó únicamente en el tren y el servicio abordado por un equipo de La Nación.
Con los nuevos horarios se eliminarán las demoras, agregó.
Los horarios del tren quedaron así: las salidas desde Belén serán a las 5:58, 6:40, 7:15, 8:05 y 8:42 de la mañana. Desde la estación al Pacífico, en San José, las salidas hacia el cantón herediano serán a las 6:01, 6:35, 7:28 y 8:05 a. m.
Por la tarde, el servicio de Belén a San José será: 4:21, 4:45, 6, 6:30, 7 y 7:50 p. m. De San José a Belén: 4:12, 5:07; 5:38; 5:55 y 7:10 p. m.