Contencioso ordenó frenar construcción de nuevo liceo

Medida pretende evitar posibles daños ambientales que sean irreversibles

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Una calcomanía en el gran portón del nuevo Liceo de Mata de Plátano, en Goicoechea, lleva la orden del Tribunal Contencioso Administrativo de suspender construcciones.

La medida cautelar de carácter provisionalísimo, notificada el 22 de febrero, paralizó cualquier obra o trabajo en el lote para prevenir daños ambientales irreversibles.

El terreno ya fue sometido a estudios previos de órganos estatales, como los de la Comisión Nacional de Emergencias y del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara), que verificó la existencia de pozos y nacientes cerca del sitio.

La construcción del Liceo se inició desde diciembre, y este mes estrenó curso lectivo con ocho aulas concluidas. El fallo del Tribunal no impide a unos 275 colegiales asistir a clases regulares, pero sí que se levante un comedor y una soda, las principales obras faltantes.

El responsable de la demanda ante el Contencioso fue el comité de vecinos del residencial Bernardo Iglesias, que es la única vía de acceso al terreno, de cuatro hectáreas.

La demanda se suma a varios intentos de los vecinos para evitar la apertura del Liceo de Mata de Plátano, desde que la asociación a cargo compró el lote hace cinco años.

Olga Castillo, del comité, aclaró que sus acciones no van en contra de que haya un nuevo colegio, ni de los alumnos; lo que reclaman, dijo, es que se haga en ese terreno por los daños ambientales que ocasiona.

“Es lamentable que esta suspensión no sucediera antes de que se iniciaran las clases. Así, no se habría perjudicado a los estudiantes, que, al fin y al cabo, sufren la trágica consecuencia de una mala planificación”, afirmó Castillo.

Agregó que la no suspensión de las lecciones les crea aún más temor, pues, además de que el paso de los colegiales frente a las casas “alteró la vida pacífica” que había, su estancia en el lote lo dañará más.

Permiso. La Asociación pro Construcción del Colegio cuenta con el permiso de viabilidad ambiental, que otorga la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena).

Sin embargo, el pasado 29 de febrero, Senara se pronunció –a petición de los vecinos– con pruebas de que en la zona hay siete pozos registrados y dos nacientes. El pozo más cercano está a 70 metros del centro de la propiedad a construir.

Senara recomendó una serie de acciones preventivas que, según Castillo, nunca fueron acatadas.

Por su parte, Rosa Cubero, presidenta de la Asociación, dijo que la sentencia le tomó por sorpresa, que se limitará a contestarla y que el lío se debe a una interpretación errónea del estudio de Senara.

“Lo que hay es un pozo que está registrado en la urbanización, no en el lote. Ni siquiera es cerca, estamos a unos 200 metros. El único daño que se hizo en el terreno de potrero fue un raspado”, dijo Cubero.

Según Álvaro Leandro, de la Junta Directiva del Liceo, el que tiene que encargarse de rendir cuentas es el municipio de Goicoechea.

“Estamos tranquilos: el permiso de construcción se nos vence el 14 de noviembre, y con los otros trámites estamos en regla. Esto es un tema del municipio”, dijo Leandro.

Los alumnos del Liceo se trasladaron a clases durante cinco años hacia tres sitios distintos, mientras se concretaba el nuevo edificio.