Comunidades les declaran la guerra a líneas de alta tensión

Los pobladores reclaman ausencia de información y, en algunos casos, falta de transparencia por parte del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) encargado de esa parte del proyecto.

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Convencidos de que juntos son más fuertes, vecinos de Quepos y Pérez Zeledón se han unido en la batalla contra el cableado de alta tensión que pretenden hacer pasar por sus comunidades.

Los pobladores reclaman ausencia de información y, en algunos casos, falta de transparencia por parte del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) encargado de esa parte del proyecto.

Además, se quejan de sorpresivos cambios en el trazado de la red así como de la pérdida de valor de sus propiedades a raíz de la inminente llegada de las torres y sus líneas de transmisión.

Jaqueline Briceño, maestra y vecina de Matapalo, pequeño caserío ubicado a 30 kilómetros de Quepos, en el cantón de Aguirre, dijo que hay desinformación.

“El temor de la gente ha sido uno de los contras al proyecto porque piensan que podrían contraer cáncer, que les va a producir problemas de infertilidad, y el ICE, que levanta las torres, no ofrece elementos de juicio necesarios para tomar una decisión”, comentó la educadora.

Briceño explicó todas las comunidades por donde se tiene proyectado que pasen las torres están unidas en el grupo que presentó la denuncia ante los tribunales. En ese litigio están Matapalo, Barú y Alfombra, entre otros.

Según conocen los vecinos, explicó Briceño, en el proyecto había tres rutas por donde iban a pasar los cables, pero, por ahorrar dinero, decidieron tirarlos por media comunidad.

Los cables pasan cerca del Ebáis, del colegio, la escuela y sobre varias nacientes de agua.

¿Engaño? En criterio de Vecinos de caseríos en Pérez Zeledón y Aguirre, el ICE los “engañó” para apropiarse de sus terrenos.

Según ellos, funcionarios del ICE llegaron en el 2002 a solicitarles la firma de un contrato para ingresar a las fincas, pero solo a “mirar”, a lo cual accedieron.

Años después, el ICE volvió con la amenaza de expropiarlos para poner las torres.

Los lugareños reclaman que, cuando el ICE se acercó a explicar el proyecto, les prometieron mejoras, pero estas no llegaron, y ahora, por el mismo cableado, las tierras han perdido hasta tres veces su valor.