Si en algo concuerdan los representantes de la Caja Costarricense de Seguro Social y la Unión Nacional de Médicos, es que el diálogo llegó tarde.
El consenso se alcanzó el viernes, pero solo después de 15 días de huelga, medida que implicó la suspensión de casi 3.000 cirugías y 20.000 consultas.
Menos de 24 horas después de alcanzado el acuerdo, los negociadores hicieron un balance del paro y de las implicaciones de este, tanto para la institución como para los asegurados.
Para el representante de los especialistas, el retraso fue por un desinterés de la Caja en atender sus peticiones. Mientras, el gerente de la institución alega una falta de comunicación.