Cartago puso en marcha su ciclovía, centro de polémica

Cuatro recursos de amparo y múltiples quejas no paralizaron iniciativa del municipio

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Meses de disconformidad, cuatro recursos de amparo, una serie de protestas a viva voz: nada impidió la inauguración de una ciclovía en la ciudad de Cartago.

Nació ayer, en medio de un ambiente festivo y tras la bendición del obispo de Cartago, monseñor José Francisco Ulloa. En total, 500 ciclistas de edades variadas se inscribieron para “dar un paseo” sobre los seis kilómetros de la ruta recientemente habilitada.

Mientras esos entusiastas se alistaban a pedalear en el parque de la basílica de los Ángeles, un grupo de pocos manifestantes disconformes empezó su ruta a pie, y con pancarta al hombro, por la misma vía.

Aunque reiteraron sus reclamos por haberse quedado “sin aceras” y por “vivir inseguros por posibles atropellos” justo al frente de sus casas, el acto de los quejosos no obstaculizó la actividad ni mucho menos fue protagonista.

“En Cartago, todo el mundo está en contra de lo que sucede, pero no se expresa y no protesta. Esta es una marcha por nuestra dignidad” declaró Berna Gómez, del grupo Coordinadora Cívica Cartaginesa.

Trabas. El historial de la obra en la Vieja Metrópoli es complejo: desde su inicio, en mayo, se presentaron cuatro recursos de amparo para frenarla, por falta de planificación y estudios que garanticen su uso.

La Sala Constitucional rechazó los primeros tres recursos. Empero, la última resolución (de la semana pasada) condenó al municipio por no contar con los permisos de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena).

“Nosotros le hemos pedido a la Sala revocar ese fallo. El impacto ambiental se dio cuando se construyó la calle; ahora solo estamos sustituyendo asfalto por cemento. Aquí no hay daño y todo eso no impidió esta apertura”, dijo Rolando Rodríguez, alcalde de Cartago.

Según Berna Gómez, los opositores del alcalde planean solicitar un plebiscito para destituirlo, pues le cobran acciones como “su viajadera todo el año y su choque injustificado, en diciembre, con un carro del municipio”.

La ciclovía costó $700.000 (unos ¢350 millones) que donó la Federación Internacional del Automóvil. Aún está incompleta y algunos topes de cemento están destruidos.