El Banco de Costa Rica (BCR) anunció este lunes 22 de enero el cierre de siete sucursales físicas con el argumento de que lo hace con el objetivo de optimizar su modelo de negocio y mejorar la experiencia del cliente. En el comunicado de prensa enviado por la institución, no se indica a partir de cuándo regirán tales cierres.
Según la entidad bancaria, dicha iniciativa responde a la dinámica del sector económico, los avances tecnológicos y las demandas de los clientes en un entorno donde la utilización de canales digitales se ha vuelto importante.
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Estas son las sucursales que cierran:
Se trata de las oficinas situadas en San Rafael Abajo de Desamparados, José María Zeledón, Galería Escazú, Los Colegios de Moravia, Curridabat, Manuel Antonio y City Mall.
“Esto, sin afectar la cobertura total del Banco. Simultáneamente, se ampliarán los servicios en otras oficinas, buscando mejorar la experiencia del cliente tanto en el ámbito físico como digital”, indicó el BCR a través del comunicado.
El BCR comentó que el plan de dicho cierre se focalizará en la optimización de las oficinas comerciales y sus roles, y que la decisión se basó en un estudio detallado, considerando factores como:
- La ubicación estratégica dentro de las comunidades.
- El tránsito de clientes.
- La cercanía.
- La migración hacia canales digitales.
El cierre de oficinas se compensará con la expansión de servicios en otras localidades, indicó el BCR.
“Nuestro compromiso fundamental es robustecer en forma integral la experiencia en la atención y satisfacción de los clientes, con el mejoramiento de la propuesta de valor para potenciar la relación comercial”, indicó Rina Ortega, subgerenta de Banca de Personas.