Aresep quiere alargar vida de buses para bajar tarifas

Algunas empresas sustituyen unidades a los cuatro años; se recomiendan 11 más

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Los usuarios podrían beneficiarse de tarifas de bus más bajas si las empresas sustituyeran sus unidades cada 15 años y no cuatro o siete, como es usual.

La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) busca ampliar ese plazo presionando a las firmas a mejorar el mantenimiento a los vehículos.

Enrique Muñoz, intendente de Transportes de Aresep, explicó que la legislación tributaria establece un lapso de siete años por depreciación, en tanto la Autoridad estima en 15 años la vida máxima autorizada para los autobuses, mismo periodo que duran las concesiones. Sin embargo, los empresarios cambian unidades incluso cada cuatro o cinco años.

“La depreciación acelerada hace que, en cuatro años, se le reconozca a las empresas el 80% del valor de un solo bus. Entonces, las empresas se ven estimuladas a renovar su flota –y así encarecer tarifas– mucho antes de lo debido”, comentó la vocera de Aresep, Carolina Mora.

---

Sin embargo, para Jorge Herrera, gerente de Coopana (rutas Tibás–San José y Santo Domingo de Heredia–San José), alargar a 15 años la vida de los autobuses “es ilegal y arbitrario” y solo desmejoraría la calidad del servicio.

“Este sería un cambio grandísimo que afectaría a empresarios y usuarios y desincentivaría la compra de buses. Aresep quiere brincarse la ley y eso lleva implicaciones muy graves”, alegó.

Debate. La vida útil de las unidades es uno de los seis temas que la Aresep busca resolver antes de abril, para lo cual convocó a ocho audiencias públicas con el sector transportes, con la idea de variar el cálculo de las tarifas.

Según Muñoz, lo que pagan los usuarios no se ve del todo reflejado en la calidad y el costo del servicio que se recibe.

Hoy, el rubro de los combustibles pesa un 20% en la tarifa; los salarios un 22%; los costos operativos y de mantenimiento, el 25%, y los gastos administrativos, 8%.

El restante 25% corresponde al costo de inversión que solicita cada empresario en sus estudios.

La Aresep también propone que se considere el precio al que se vendió el diésel en los últimos seis meses, y no solo el día de la audiencia, como se hace ahora. Eso contribuiría a que los pasajes estén más acordes a la realidad.

La entidad además pretende que el precio de los buses se defina con datos de Hacienda y no con cotizaciones de proveedores.

No es la primera vez que los autobuseros escuchan sobre esta propuesta, pues lleva unos tres años sobre la mesa, más dos sesiones públicas fallidas.

Los encuentros se realizarán en el Colegio de Ciencias Económicas, desde el 21 de enero hasta el 11 de marzo. Una vez concluidos, el texto final (con las respectivas modificaciones), estaría en manos de los directos de la Aresep el 27 de marzo.