ANEP admite fracaso en proyecto hotelero que costó ¢379 millones

Estudio confirma fallas en el manejo de recursos y en proceso de construcción

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El “sueño” de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) de levantar el proyecto hotelero El Tití, en Quepos de Aguirre, Puntarenas, quedó en obra gris y con gastos por ¢379 millones.

El dinero salió del sindicato con cheques que nadie revisó, sin facturas, con falta de estudios técnicos y sin libros contables que registraran los movimientos financieros.

Así lo confirma un informe de auditoría externa de la empresa Rojas Ceciliano S.A. que pagó la ANEP en el 2012 y que evidencia fallas de un proyecto que “no va a poder ser aprovechado”.

“La auditoría la pedí yo, porque cuando solicité los libros contables de la ANEP del año 2000 a la fecha, me dijeron que esos libros no existen. Esa auditoría empezó en junio y tuvo serios atrasos por culpa del mismo Albino (Vargas, secretario general)”, manifestó el fiscal de la ANEP, José Manuel Gómez.

El responsable del proyecto –que se inició desde el 2006– era un biólogo de apellido Picado, a quien se le cancelaban cheques en calidad de asesor financiero.

Se intentó localizar a Picado, pero no aparecen números telefónicos a su nombre.

Sin estudios. La idea de crear un centro turístico para los afiliados de la ANEP presenta errores en los estudios de factibilidad y las obras “se iniciaron sin el permiso de construcción y sin la evaluación de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena)”, de acuerdo con la auditoría.

“El principal responsable de esto es Albino Vargas, quien debió de dar seguimiento al caso y el señor Pablo Freer que es el encargado de finanzas de la ANEP y quien debe ser despedido sin responsabilidad patronal”, añadió el fiscal Gómez.

La Nación consultó a Pablo Freer sobre el “ descontrol financiero” que reporta la auditoría externa, sin embargo, este se negó a responder a los cuestionamientos.

“No tengo conocimiento del informe, hasta mañana (hoy) lo sabré y no voy adelantar criterios”, manifestó el encargado de finanzas.

Albino Vargas, secretario general del sindicato, aseguró ayer que hoy daría a conocer estos datos a los asociados, en la asamblea extraordinaria de la organización.

“Vamos a rendir cuentas de un sueño que tuvo la ANEP en determinado momento y que no nos salió bien, evidentemente el proyecto es un fracaso”, reconoció Vargas.

Aunque el líder sindical aceptó las debilidades de la obra, prefirió no adelantar las responsabilidades que sentarán por tal “fracaso”.

“Vamos a ver qué pasa con los responsables, yo no quisiera referirme más. Entienda que primero son los socios de la ANEP los que deben analizar esto. Para nosotros ha sido una experiencia delicada”, expresó Vargas.

La auditoría externa de Rojas Ceciliano S. A. determinó que los recursos, instalaciones y equipo de la ANEP fueron “manejados con absoluto descuido”.