En los últimos dos años cerca de 8.000 familias de Alajuela y Limón lograron el resguardo de un techo propio gracias al disfrute de un bono de vivienda.
Eso significa que 4 de cada 10 bonos otorgados entre mayo del 2010 y junio de este año beneficiaron a familias de esas dos provincias.
Así lo detalla el Ministerio de Vivienda y Asentamientos Humanos (Mivah) como parte de su programa dedicado a disminuir el déficit habitacional en el país.
En el año a partir de mayo del 2011 se otorgaron en total 20.704 bonos de vivienda, cuando el promedio de entrega es de aproximadamente 11.000 bonos por año.
En Limón se construyó la mayoría de casas (el 21% del total), seguido por Alajuela (20%) y San José (16%).
Según datos del Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi), el total de casas otorgadas significó una inversión de ¢136.000 millones.
Según un comunicado de prensa, el 73% de viviendas se destinó a 15.149 familias de estrato uno, cuyos ingresos mensuales son menores a ¢204.980.
El informe del Ministerio indica que la mitad de bonos se entregó a mujeres jefas de hogar. Asimismo, se tomaron en cuenta familias indígenas, de adultos mayores y personas con discapacidad.
Irene Campos Gómez, ministra del ramo, informó de que también se otorgaron bonos comunales y a partir de estos, se auxilió a unas 7.500 familias de Desamparados, Cartago y San José centro.
“Estos bonos reflejan el abordaje integral de atención a las comunidades, habilitan espacios para la recreación y el deporte y dotan de condiciones de infraestructura básica a las familias”, explicó Campos.
La jerarca dijo que los subsidios comunales no sustituyen a los de vivienda, sino que los dos se complementan. Aclaró además que ambos presupuestos se manejan por separado.
Con respecto al tema de la erradicación de tugurios, desde mayo del 2010 hasta abril de este año, se solventó la condición habitacional de 3.376 familias.
Hoy quedan en el país cerca de 328 asentamientos calificados como precarios o tugurios, según cifras oficiales.
Falta trecho. Aunque hay estabilidad en el número de entregas con respecto a años pasados, Campos aseguró que el sistema actual de bonos gratuitos es insostenible para el país.
Es por esto que actualmente se estudia la reforma a la ley en una comisión interinstitucional.
Mientras tanto, con tal de ejercer un mayor control, el Ministerio dictó una directriz que consiste en analizar la capacidad de crédito de todas las familias.
Así, el subsidio de vivienda vendrá acompañado de un crédito que solamente obtendrán quienes puedan pagarlo.
La jerarca de Vivienda se mostró complacida con la cantidad de bonos entregados durante el periodo 2010-2012 , aunque reconoció que todavía hay casos que atender.
A pesar de los esfuerzos de los últimos años, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), en el país hay todavía 30.000 familias urgidas de vivienda. Colaboró la corresponsal Jessica Salazar