Redacción
La Policía de Tránsito presentó a 122 conductores ante el Ministerio Público por conducir en estado de ebriedad. La cifra corresponde al acumulado de choferes borrachos que los oficiales de carretera detectaron in fraganti entre el 1.° y 17 de julio, durante las vacaciones de medio año.
En estos casos, la cantidad de alcohol registrada en el organismo es tan elevada, que los infractores se exponen a una pena de 1 a 3 años de cárcel por conducta temeraria penal.
Además, otras 14 personas deberán pagar una multa de ¢309.575 y sumarán seis puntos de su licencia por combinar alcohol y conducción.
En los operativos de tránsito realizados durante las vacaciones, los oficiales realizaron en total 1.540 alcoholemias, detalló Mario Calderón, director de la Policía de Tránsito.
"Es muy lamentable que casi el 10% de los conductores sometidos a las pruebas de espiración de aire dieran positivo, denota irresponsabilidad, irrespeto a las otras personas y un serio problema conductual donde las personas no tienen capacidad de decidir entre tomar y conducir, creen que el alcohol no afecta sus capacidades físicas y mentales", manifestó Calderón.
En esos mismos operativos tres conductores fueron sancionados por viajar a más de 120 kilómetros por hora, por lo que deberán pagar ¢309.575 y tendrán seis puntos más en su licencia.
Cuando un chofer acumula 12 puntos en su permiso de conducir, pierde el derecho a manejar durante un año.
Asimismo, 47 superaron por 40 kilómetros por hora los límites permitidos, 118 viajaron 30 kilómetros por hora más rápido de lo establecido por la ley y 106 conductores viajaron 20 kilómetros por hora por encima del máximo.
Calderón mencionó que en estos últimos casos las multas oscilan entre ¢209.200 y ¢51.250.
En total, durante vacaciones de medio año se confeccionaron 10.487 boletas, se contabilizaron 14 fallecidos y se decomisaron 382 vehículos y 1.137 pares de placas.