El Colegio de Optometristas de Costa Rica denunció esta mañana la existencia de centros de tratamiento ilegales a lo largo de todo el país. Se trata de unidades móviles o habitáculos inadecuados en los que se realizan exámenes a muy bajo costo, lo que atrae a gran parte de la población.
Exámenes de vista por ¢1.000, ofertas de dos por uno o estudios totalmente gratuitos son algunos de los reclamos contra estas empresas.
Estas prácticas se empezaron a detectar en 2009, según apuntó Enrique Garita, presidente del Colegio de Optometristas. En esta fecha, empezaron a llegar las reclamaciones de particulares y colegas del gremio que habían detectado estas irresponsabilidades.
Lo más grave es que algunos profesionales actúan bajo el nombre de fundaciones u organizaciones sin ánimo de lucro, tal y como apuntó Ana Yancy Mata, la fiscal del colegio.
"No podemos apoyar situaciones donde se cometen atropellos como abusos a los usuarios, mala praxis, competencia desleal y un mercantilismo donde la evasión fiscal y municipal es evidente", dijo Mata.
Por ello, es muy importante educar a la población para que sean capaces de identificar las malas prácticas.
Los pacientes pagan a los supuestos profesionales de estas clínicas de 'garaje', como son denominadas por los miembros del Colegio de Optometristas, y tras recibir un mala atención buscan ayuda en los especialistas reales.
Detectar este tipo de prácticas es muy complicado porque en su mayoría actún a través de giras móviles y durante los fines de semana, argumentó Adrián Chavarría, vocal del Colegio.
El Colegio de Optometristas de Costa Rica denunció está problemática ante el Ministerio de Salud y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).