En cuestión de un año, entre 2021 y 2022, el número de muertes por infarto agudo al miocardio aumentó en un 11%, según datos de Vigilancia de la Salud del Ministerio de Salud.
En este periodo, los decesos por este motivo pasaron de 1.928 a 2.144, convirtiéndose de nuevo en la principal causa de mortalidad en el país, como había ocurrido desde 1970, excepto por los dos años de pandemia de covid-19.
Según la información suministrada por Salud, del total de fallecimientos por infarto del año pasado, 869 corresponden a mujeres (40%) y 1.275 a hombres. (60%). El grupo etario más afectado es el mayor a 75 años, que registró 1.178 defunciones, (el 54,94%).
Un infarto es la muerte celular que se produce en el tejido de un órgano o músculo concreto a causa de la falta de sangre y, en consecuencia, falta de oxígeno. Puede darse en muchos sitios del cuerpo, pero el más común es el del corazón.
El infarto agudo al miocardio es un evento que puede tardar años en desarrollarse y, por así decirlo, estallar. Por lo general, comienza con la acumulación de una placa de calcio o grasa en las arterias, la cual, poco a poco, dificulta el paso normal de la sangre. Las arterias coronarias son particularmente importantes porque son las encargadas de llevar sangre y oxígeno al corazón. Si el flujo sanguíneo se bloquea, el corazón sufre por la falta de oxígeno y las células cardíacas mueren. Allí se produce un infarto.
Entre los síntomas más comunes están el dolor muy fuerte y opresión en el pecho, que puede aparecer de forma brusca o durante el ejercicio. De igual modo, puede presentarse dolor en la mandíbula, cuello, espalda, brazo izquierdo, zona abdominal, mareo intenso, sudor, cansancio, latidos anormales del corazón, dificultad para respirar, náuseas y vómitos.
El Ministerio de Salud llamó a la población a tomar acciones que favorezcan la prevención y control de cardiopatías: controlar la presión arterial, llevar dieta baja en grasas saturadas y colesterol, controlar el peso, consumir frutas y verduras y evitar el fumado.
Además, recordó la importancia de llevar controles médicos rutinarios, con el fin de que pueda monitorear su presión arterial y recibir diagnóstico y tratamientos oportunos en caso de ser necesario y en caso de presentar algún síntoma visite el centro de salud más cercano.