Texto original publicado por La Nación el 17 de junio de 1972
Supimos que el Hospital Nacional de Niños Dr. Carlos Sáenz Herrera, había recibido en calidad de donación de la Asociación de Esposas de Pediatras, un moderno equipo denominado “Test Gesell”, por lo que decidimos entrevistar al director de ese centro infantil de salud, doctor Edgar Mohs Villalta, de quien son las siguientes impresiones.
“La desnutrición en la niñez es una enfermedad muy generalizada en Costa Rica. En los últimos años se ha tratado de evaluar la magnitud del problema y por diversos medios informativos se han dado a conocer al público algunos datos significativos.
“El Hospital Nacional de Niños no está exento de sufrir el impacto de la malnutrición infantil, de tal forma que cada mes salen más de 100 niños con el diagnóstico de desnutrición severa y un buen porcentaje de los que fallecen también llevan este diagnóstico. Por otra parte, conocemos que la desnutrición en Costa Rica se presenta sobre todo en el niño menor de un año, lo que está muy relacionado con la ausencia de lactancia materna o del destete muy precoz”, explicó el médico.
Según explicó el doctor Mohs, en el centro médico desde hace dos años “se creó un servicio exclusivo para la atención especializada de estos niños desnutridos graves. Los objetivos de este servicio son, además de la atención integral del niño, la enseñanza a los médicos y enfermeras en formación y la investigación clínica, que nos va a proporcionar un mejor conocimiento de las variables de esta enfermedad y sus complicaciones en nuestro medio.
“Entendemos por atención integral del niño desnutrido no solo tratarle las complicaciones como diarrea, anemia, bronconeumonía, entre otros, y recuperarlo nutricionalmente, sino proporcionarle cuidados especiales de enfermería, estimularle en su masa muscular con ejercicios especiales por medio de fisioterapia, ayudarle a desarrollar sus sentidos, entre muchas otras destrezas”, reconoció el director.
En otras noticias:
Internos de San Lucas trabajarán para IMAS
Un plan por desarrollar entre Adaptación Social y el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), fue presentado por el presbítero Armando Alfaro Paniagua, director ejecutivo de esta institución, ante el respectivo consejo directivo, para la elaboración de bloques de cemento en la isla San Lucas.
Adaptación social expuso este programa de ayuda mutua y propuso al IMAS trabajar en conjunto en la elaboración de los bloques. Según estudios realizados, su costo, con medidas de diez por veinte pulgadas, sería de ¢44,98 por cada cien unidades. Es decir, cada bloque costaría ¢0,45.
Se nos informó que para el desarrollo de esta industria, sería necesario montar la fábrica con dos máquinas, cada una cuesta ¢10.000, con la inclusión de otros gastos indispensables. Estudiarán la posibilidad de poner en marcha esta actividad, que también beneficiará a los reclusos de San Lucas.
Rusia sufre estragos del alcoholismo
El gobierno de Rusia decretó ayer medidas para el riguroso control de la producción y expendio de licores, en una continuación de la campaña contra el alcoholismo, el azote social número uno en la Unión Soviética.
Las disposiciones de los decretos, publicados ayer en Pravda, el órgano del partido comunista, harán más difícil que el trabajador pueda tomar vodka y otro licor fuerte durante las horas laborales en los días de trabajo, mediante la restricción de las existencias en los expendios y restaurantes.
Las medidas siguen a un infructuoso intento de frenar la embriaguez mediante la subida del precio del vodka, disposición tomada hace algunos años, y dotar de medios de represión a la campaña pública contra el alcoholismo iniciada apenas hace unos días.