Texto original publicado por La Nación el 12 de marzo de 1973
Una nueva deuda ha sido acumulada por el Estado, en sus obligaciones dentro del régimen de Enfermedad y Maternidad con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Así lo informó el gerente de la institución, Álvaro Vindas González, al revelar que solamente por ese régimen sin incluir el de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), la deuda estatal asciende a ¢42 millones.
Informó Vindas que en la conversación que recientemente tuvo con el que asumirá la presidencia de la Asamblea Legislativa, don Luis Alberto Monge, le expuso claramente el fondo de este asunto y dijo: “Próximamente me presentaré al Congreso para hablar de esta situación a cada una de las fracciones parlamentarias”.
Informaré a los diputados. Agregó que la Caja debe hacer de los hospitales de Nicoya, Monseñor Sanabria, en Puntarenas y Guápiles este año, pero, ante la situación imperante, “no se puede hacer chocolate sin cacao”.
“El monto adeudado por el Estado representa el presupuesto que se requiere para la apertura del Hospital Monseñor Sanabria. Dijo que en este momento se trata de un nuevo acumulativo ya que en 1971 hubo un arreglo con la deuda que hasta entonces tenía el Estado con la Caja”, concluyó Vindas.
En otras noticias
Juega con un rifle y mató a su hermano
Redacción. El niño W. R. R., de 7 años, vecino de Carbonal de San Roque de Grecia, falleció poco antes de llegar al hospital San Francisco de Asís. Fue víctima de un disparo que le perforó partes vitales cerca del corazón. Según la versión preliminar de las autoridades, su hermano de 12 años jugaba con un rifle calibre “22 U” e, inesperadamente, el arma se disparó sola. El proyectil hizo blanco en el pecho del niño, quien fue trasladado muy grave por la Cruz Roja al hospital.
Roban encendedor que cuesta ¢5.000
Un señor de apellido John denunció que una amiga que acaba de conocer, le robó un encendedor que vale ¢5.000 y ¢10.000 en efectivo. “La damisela abusó de mi confianza al grado que me descuidé un segundo y ya había desaparecido el encendedor y los ¢10.000″, dijo la víctima. Como acababa de conocer a la señorita, no pudo dar a la Policía informe de su identidad, solamente la describió. Según las autoridades se encuentran investigando el caso para dar con la sospechosa.