Sigifredo Vargas Soto padece de cataratas en los dos ojos. En el Hospital San Carlos le dieron una referencia para que el especialista en Oftalmología lo atienda en el 2017.
“No quiero esperar tanto tiempo para que me hagan una cirugía.
”Soy un pensionado que tiene una pensión muy pequeña, pero estoy dispuesto a conseguir un dinero prestado para que me operen en un centro privado”, aseveró este sancarleño.
Vargas comentó que su capacidad visual está muy disminuida y que el problema se ha venido agravando debido a la diabetes que padece.
“Mi caso justifica una atención inmediata, pero en el Hospital San Carlos no lo ven así y me están haciendo esperar más de lo que imaginaba”, manifestó con pesar.
“Los asegurados protestan y la mayoría de las veces con justa razón”, agregó.
Generalizado. En ese hospital se escuchan historias muy parecidas a las de este pensionado.
La preocupación porque las afecciones de la vista evolucionen y muchos puedan quedar ciegos o con la capacidad visual disminuida, es comentario aquí todos los días.
Las autoridades del Hospital de San Carlos reconocen el problema, al tiempo que sostienen que es poco el margen de acción que tienen.
Las citas en Oftalmología en este centro de salud para ser vistos por primera vez se están dando para dentro de cuatro años.
La lista de espera ronda los 2.500 asegurados, según registros de la Dirección General de este centro de salud.
La diabetes mellitus es una de las principales causas de problemas de la vista y de ceguera en Costa Rica.
Dichos problemas de salud se agudizan debido al aumento en la longevidad de la población nacional, cuya expectativa de vida sobrepasa ya los 80 años.