Más de 75.000 vecinos del cantón de Pérez Zeledón, que deberían ser atendidos en los Ebáis de sus comunidades –si estos existieran– terminan saturando la consulta externa del Hospital Fernando Escalante Pradilla.
La falta de otros 16 Equipos Básicos de Atención Integral en Salud (Ebáis) obliga a toda esta población a buscar atención en ese hospital regional.
Desde que se abrieron los primeros 19 Equipos, en 1994, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) no ha completado la lista de 35, que son los que se requieren para dar abasto con los más de 150.000 habitantes de esta zona.
Juana Mora Bonilla tiene 77 años, padece de hipertensión y diabetes. Es vecina de San Isidro de El General y es una de los 75.000 habitantes del cantón que no son cubiertos por un Ebáis.
El problema se agrava en el distrito cabecera del cantón, San Isidro de El General, ya que en este poblado de 45.000 habitantes no hay un solo Ebáis. Estas personas son atendidas en cinco consultorios que el hospital ha destinado para la atención básica en salud.
Ahmed Guevara, director del Área de Salud de Pérez Zeledón, explicó que el cantón está funcionando con los mismos Ebáis que se abrieron en 1994, cuando la población apenas superaba los 100.000 habitantes.
“Antes del 2006, los Ebáis eran administrados por el hospital. El Área de Salud funcionaba como una dependencia del mismo (sic). Después de ese año, se inició un proceso para separarlos del hospital.
”Cuando se hizo esta separación, el hospital se dejó a cinco médicos generales para que dieran consulta”, dijo Guevara.
Según el funcionario, hay un proyecto para sacar a esos cinco médicos del hospital. Ellos, personal administrativo y de farmacia, se ubicarían en otro edificio. Al equipo, se sumarían de tres a cinco médicos más, lo que dejaría al cantón con un aproximado de 29 Ebáis”, explicó.
La Gerencia Médica de la CCSS ya aprobó la apertura de los nuevos equipos, los cuales tendrían una inversión inicial de ¢100 millones. Sin embargo, aún no se sabe de dónde saldrá ese dinero.
Alivio hospitalario. La salida de estos cinco médicos liberaría espacio en el Hospital Escalante Pradilla, lo cual sería aprovechado para contratar a nuevos especialistas que ayudarían a mejorar la atención y a bajar las listas de espera.
Ramón Castro, director administrativo del hospital, explicó que el centro médico tiene que luchar con el hacinamiento de pacientes y del personal.
“El problema que nosotros tenemos es que el hospital tiene que crecer para adentro ya que no hay espacio para construir. Los consultorios que se liberarían pueden ser utilizados para traer a más especialistas y agilizar las cirugías y la atención”, dijo Castro.
Actualmente, el Escalante Pradilla redujo de 12.400 a 7.371 las personas en lista de espera en el periodo de junio del 2012 a junio de este año.