La elevada tasa de incidencia en pacientes con insuficiencia renal crónica en la provincia de Guanacaste, podría estar asociada a la automedicación y el consumo de bebidas alcohólicas, revelaron los primeros hallazgos de un estudio que realiza la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), en esa provincia desde agosto del año pasado.
Según los datos de la institución, en Guanacaste la cifra de hospitalizaciones por la enfermedad renal crónica alcanza los 112.9 pacientes por cada 100.000 habitantes, mientras que en Cartago, segunda zona más afectada la tasa es de 43.8 por cada 100.000.
Por esta razón, la investigación pretende conocer los factores que podrían explicar el por qué esa zona geográfica tiene tres veces más alta la incidencia de esa afección que el resto del territorio nacional.
Uno de los aspectos más alarmantes es que la afección se está detectando en pacientes jóvenes que superan apenas los 20 años, mientras que en el resto del país se detecta en mayores de 65 años con problemas de diabetes o hipertensión.
La enfermedad renal crónica es un padecimiento que daña la función renal e imposibilita la filtración de los diferentes desechos del organismo, lo cual produce severas complicaciones que pueden poner en riesgo la salud de la persona afectada.
Según el doctor Roy Wong, coordinador de la investigación, el estudio lleva un avance de 42% y el fin además de saber los factores implicados es diseñar estrategias de promoción, prevención e intervención para reducir el riesgo de la enfermedad.
Los primeros datos revelan una incidencia en hombres que trabajan en labores agrícolas, de entre 20 y 50 años.
Entre las medidas que se han tomado hasta ahora, está la realización de la diálisis peritoneal, para lo cual se dispuso de un programa domiciliar y una nueva unidad en el centro de salud de Cañas.
Este procedimiento permite depurar el organismo de sustancias nocivas cuando fallan los riñones, el mismo mejora la sobrevida de los pacientes que esperan un trasplante de riñón.